Durante la celebración de su primer año en el poder, Nicolás Maduro anunció la puesta en marcha de una «revolución fiscal» para aprovechar la riqueza de Venezuela e invertirla en educación, salud y vivienda, entre otras áreas.
«No será una reforma fiscal sino una revolución para captar completamente la riqueza del país y la convirtamos en educación, salud, vivienda, vialidad, alimentos, vida del pueblo», subrayó Maduro desde el Palacio de Miraflores, donde tuvo lugar la conmemoración, según publica el diario «El Universal».
En esa misma línea, consideró que el trabajo que hace la clase obrera tiene un fin social, a diferencia de la «cuarta República», en la que, según apuntó, se trabajaba para un «imperio o un patrón». Asimismo, indicó que «hay que ensanchar la base de recaudación a los que más tienen porque es para el bien social y económico del país» y solicitó una «disciplina máxima laboral» a los empleados de las empresas básicas estatales de Guayana y el resto del país.
«Cultura del ahorro»
Por otro lado, el dirigente pidió al pueblo venezolano construir una «nueva cultura de ahorro» porque, para él, la «felicidad verdadera» no se consigue con bienes materiales, aunque reconoció que con pobreza y miseria «se dificulta la felicidad». Los excedentes en la recolección de impuestos fiscales por el Seniat es «señal de que nuestro pueblo está ganando y está pagando», señaló.
En cuanto al empleo, Maduro confirmó que en febrero de 2014 se consiguió la menor tasa de desempleo de los últimos 20 años y aseguró que la calidad del empleo formal también ha aumentado progresivamente desde 2003 hasta situarse en 61 por ciento en 2013. «El pueblo venezolano no ha pasado hambre ni pasará jamás hambre en revolución», recalcó.
Por último, el mandatario declaró que la Canasta Alimentaria Normativa aumentó «por la guerra económica» a casi 500 dólares en el año 2013 y a casi 600 dólares en 2014, y subrayó que el Gobierno sigue cuidando el salario porque el ingreso mínimo ha aumentado a prácticamente 750 dólares este año, producto de la suma de los bonos de alimentación y del salario mínimo.
ABC