Mandar mensajes eróticos a la persona que nos gusta, lo que se conoce como sexting, se ha convertido en una de las actividades favoritas de las parejas porque estimula la imaginación y el deseo.
Sin embargo, como en toda práctica sexual es importante definir las reglas sobre cómo deben ser los contenidos que se envían y en qué momentos hacerlo, pues algunos pueden resultar ofensivos.
Para que practiques el sexting, a continuación te decimos siete cosas que debes tomar en cuenta para que ese momento ardiente, no termine en algo nefasto.
No debe ser el primer contacto sexual
Si acabas de conocer a alguien o llevas poco tiempo con tu pareja, no mandes mensajes provocativos, si es que no han tenido sexo.
Aquí el sexting puede ser una forma de presión a un encuentro sexual solo por el gusto de tenerlo.
No empieces muy ardiente
Nunca olvides que la sutileza es la mejor arma de seducción.
Evita que los primeros mensajes sean fotografías de genitales o fases como “quiero co…completa”.
Sé original
Aunque lo que más se utiliza son fotos de desnudos y palabras fuertes, trata de buscar otro ángulo para conquistar a tu pareja. ¡Echa a volar tu imaginación!
Cuida el lenguaje
Algunos disfrutan de palabras obscenas pero otros no.
Por ello, es importante que tengas una buena comunicación con tu pareja y establezcan en que términos quieren expresarse.
No pidas ni envíes fotos todo el tiempo
Solicitarlas constantemente o no dejarlas de enviar a lo largo del día, puede llegar a cansar , ser aburrido y perder la chispa del momento.
Haz que esas conversaciones sean ocasionales. Recuerda que lo inesperado muchas veces es mejor.
No utilices muchos recursos
No te compliques enviando mensajes de textos rebuscados o capítulos sobre la anatomía del cuerpo.
A veces una simple fotografía provocativa sin estar desnudo, puede excitar más que un discurso sobre la sexualidad.
¡Diviértete!
Lo más importante es que debes divertirte. El sexo no es aburrido y no tiene por qué ser serlo.
Solo recuerda que si no te sientes a gusto con esto, es mejor decirlo y no hacer algo porque te sientes comprometido.
(Con información de Women’s Health)
Sumedico