logo azul

Cuál es la propuesta de Trump para su segundo período en la presidencia?

Categorías

Opiniones

Cuál es la propuesta de Trump para su segundo período en la presidencia?

 

 

A menos de una semana para la fecha de las elecciones en EEUU vale la pena preguntarse cuáles son las propuestas que tiene Trump para su eventual segundo período. Si uno busca en las páginas de su campaña (https://www.donaldjtrump.com) se encuentran mucha propaganda pero poca sustancia. Mucha propaganda MAGA pero pocas propuestas a futuro.

 

 

Durante la convención nacional  republicana  (RNC) en Septiembre, por primera vez  en la historia, no se presentó un programa. El comité nacional republicano, dada la ausencia de una propuesta por parte de candidato Trump, propuso presentar el mismo que se había presentado en la convención de 2016, él se negó, pero tampoco propuso algo alternativo por lo que al final simplemente no hubo ningún programa de gobierno para el periodo 2021-2025. Muchos podrán decir que eso no es sino un simple ritual político dado el pragmatismo que campea la práctica  política, sin embargo la discusión necesaria  entre las diferentes facciones de una organización política termina estableciendo ciertos puntos centrales, prioridades y parámetros que permiten orientar la gestión de gobierno tal como ocurrió en el caso del partido demócrata. Nada de eso ocurrió en la RNC y por tanto la dirección del partido republicano le ha dado un cheque en blanco a Trump. Ello unido con que buena parte de la convención consistió en la intervención de sus hijos y familiares «alabando su labor’’ habla de un creciente culto a la personalidad no visto en la política norteamericana hasta ahora.

 

 

En ningún momento una situación como esta es conveniente para la salud de un sistema democrático, pero en un momento como el que vivimos, en medio de una pandemia, con una creciente evidencia de efectos catastróficos del cambio climático y con crecientes retos en la arena internacional la falta de propuestas puede tener consecuencias peligrosísimas.

 

 

Dado que en verdad no hay propuestas concretas para su supuesto segundo período presidencial, analicemos  las respuestas que  hasta ahora ha dado la administración Trump a los puntos más críticos de la actualidad:

 

–  En primer lugar está  por supuesto el problema de la pandemia.  La respuesta de la administración Trump no ha podido ser más desastrosa. La incoherencia, la improvisación, el desprecio a la opinión de los científicos (a los que en privado ha llegado a llamar estúpidos) y a la ciencia misma sumado con la politización de cosas tan elementales como el uso de la máscara ha conducido a resultados terribles. Con casi 9 millones de infectados y con más de 225 mil muertos el balance es lamentable por decir lo menos. Más aún, los Estados Unidos se enfrenta hoy a una tercera ola de contagios (la inicial en Marzo, sobre todo en la costa este con epicentro en New York, la segunda en el llamado «sunbelt”  con epicentros en Florida, Arizona y Texas)  es la más diseminada con más de 41 estados registrando cifras alarmantes y extendiéndose a zonas rurales; esta claro pues que la pandemia está fuera control. Pero peor aún, las recientes declaraciones  de Mark Meadows jefe de gabinete de Trump explícitamente renuncia a controlar la pandemia pero llaman a abrir la economía sin ningunas directivas, no preludia sino más muertes que se estima podría por lo menos duplicar las perdidas actuales. Está claro que frente a la pandemia Trump no tiene un plan estructurado, no ha ejercido ningún liderazgo y parece que no le interesa, incluso ha declarado públicamente que le fastidia que se siga hablando de la pandemia, como si con ignorarla va a desaparecer. Estados Unidos tiene el peor desempeños de un país desarrollado frente a la pandemia a pesar de sus ingentes recursos. Esto es un hecho constatable: de los 43.6 millones contagiados actualmente 8.82 millones son de Estados Unidos (20%) y de 1.16 millones de muertos 226 mil son estadounidenses (19.65%) sin embargo de los 7.700 millones de habitantes en el globo sólo 331 millones viven en EEUU (4.2%) las cifras hablan por si mismas.. En toda la historia de las pandemias ha existido  siempre la tensión entre salvar vidas y mantener la economía a flote, está claro cuál es la posición de la administración Trump al respecto. Desde el mismo inicio él restó importancia, mintió descaradamente, sabiendo la gravedad de los que se avecinaba, no para evitar el pánico del público sino el de Wall Street y del índice Dow Jones. Finalmente, luego de la ayuda bipartidista que se logró para los negocios y los más necesitados en Abril no ha habido y parece que los republicanos no están interesados en una segunda ayuda que muchos requieren con urgencia y que la cámara de representantes aprobó en Junio (Hero’s act). Finalmente, en búsqueda de un chivo expiatorio y para no asumir responsabilidades, Trump decidió retirarse de la WHO, bajo la acusación de estar al servicio de China, esto en medio de la pandemia puede tener consecuencias catastróficas en el combate global de la misma.

 

 

–  En segundo lugar está el problema del cambio climático. En la campaña del 2016 Trump dijo que no creía en el cambio climático que era un invento para beneficiar a China. Coherente con ese parecer retiró a los Estado Unidos del acuerdo de Paris. Gracias a que EEUU es un estado federal, siguen habido logros y avances locales en la lucha contra el cambio climático, obteniendos gracias al esfuerzo de ciudades y  estados a pesar del sabotaje de la administración Trump, que lo único que ha hecho es avanzar en el desmantelamiento de EPA y de las regulaciones a favor del ambiente. En recientes declaraciones ha dicho que Estados Unidos tiene el agua y el aire más puros del mundo, puras frases hechas cero planes concretos. Frente a los incendios en California, Oregon y ahora Colorado,  por una parte y los crecientes huracanes en los estados del sur, dos caras extremas de la misma moneda,  no hay ninguna respuesta coherente, ni mucho menos un plan porque ello implicaría afectar los intereses  de las compañías petroleras y otros interesas tradicionales.

 

–  En tercer lugar, Estados Unidos es el único país  desarrollado que ha sido incapaz de brindar un servicio de salud universal a sus ciudadanos. El importante avance en esa dirección fue logrado en el 2010 con el «affordable care act’’ popularmente conocido como Obamacare,  y que ha logrado hasta la fecha incorporar al sistema de salud a más de 20 millones  de ciudadanos y acabo con la perniciosa practica de las compañías aseguradoras de negar cobertura a personas con condiciones pre-existentes. Ese avance ha sido combatido por los republicanos con más de 70 intentos de derogarlo, unos con argumentos político/filosóficos  partiendo del principio troglodita que un estado que hace eso es por definición «socialista”,  otros por un mero cálculo electoral. Trump prometió en su campaña en el 2016, en su obsesión de acabar con todo lo que hizo Obama, acabar con el programa y sustituirlo por una supuestamente infinitamente mejor. Por ellos se unió al esfuerzo republicano para terminarlo  por la vía legislativa ,  en el congreso lo que ha resultado infructuoso y ahora para hacerlo por la vía judicial frente a la Corte Suprema. El 10 de Noviembre es una fecha clave al respecto, en todo caso derogar  Obamacare y dejar a más de 20 millones de personas sin seguro médico en medio de la pandemia sería una verdadera monstruosidad criminal.  Ahora bien, cual sería el plan alternativo? Eso brilla por su ausencia, aparte de reiterar que se mantendrá las pólizas de personas con condiciones pre-existentes no se sabe muy bien cómo, no existe ningún plan alternativo para sustituir  Obamacare  luego de más de 4 años. Ocurre con el plan de Trump lo mismo que con sus impuestos, siempre anuncia que lo va a mostrar pero nunca se concreta…

 

 

–  En política migratoria hay que reconocer que lamentablemente ha cumplido con algo de lo que había prometido. Ha sido, eso si, una política infame, racista y despiadada contra los migrantes. Quizás la cara más horrible ha sido el de la separación de hijos menores de sus padres, para desmotivar la inmigración de familias. Los ha  recluido en sitios con condiciones infrahumanas, donde incluso los ponen el jaulas  ello habla de una política desalmada y sádica soló concebible en mentes retorcidas como la de Stephen Miller. La reciente noticia que hay más de 500 niños a los que no se saben dónde están su padres es el último eslabón de atropellos y atrocidades cometidas por esta administración. Por otra parte el famoso muro que prometió en el 2016 y que supuestamente iba a obligar a que pagara México he terminado siendo una mera operación propagandista, ya ni siquiera la menciona en su campaña,  con un modesto remozamiento de ciertas partes de la divisorias que ya existían, a expensas de fondos reconducidos en operaciones de dudosa legalidad del departamento de defensa. Respecto a los dreamers (hijos de migrantes ilegales que llegaron de niños acá) no tiene ninguna respuesta y simplemente los ha intentado utilizar como ficha de negociación. La prohibición de entrada al país de musulmanes de ciertos países es otra cara xenófoba y quizzeas anticonstitucional de su política, Finalmente, respecto al destino de más de 11 millones de migrantes ilegales que hay en el país aparte de la persecución y represión no tiene ninguna propuesta viable y realista.

 

 

–  En política exterior el panorama es todavía más desolador. Trump con su populismo nacionalista («America first”) se ha alejado de los socios tradicionales de Estados Unidos como son la Comunidad Europea, Japón y Corea del Sur. Sus socios en la OTAN lo miran hoy en día con recelo y desconfianza. La promoción de la democracia  y el respeto a los derechos humanos que fueron el eje de la política exterior estadounidense por muchos años ha quedado sólo para meras declaraciones. Esto se manifiesta en varios hechos concretos:

 

o  El abandono vergonzoso de la oposición siria dejándole el terreno de juego al dictador Bashar al Assad y su padrino Putin,  abandonado por ejemplo a las heroicas milicias kurdas, es una muestra de inchorencia y deslealtad tanto con la gente como con los valores democráticos.

 

o  En Afganistan sus conversaciones de paz con los talibanes, simplemente para retirar las tropas norteamericanas pero sin la participación directa del gobierno que distintas administraciones han apoyado hasta ahora es otra muestra de desinterés y pragmatismo.

o  El caso venezolano es un capítulo aparte, donde la incoherencia e inconstancia ha llevado la situación a un punto muerto que terminó  fortaleciendo al narcorégimen de Maduro, y que se puede sintetizar con el refrán «mucho ruido y pocas nueces’’. Basta revisar el libro de John Bolton que tiene un capítulo completo dedicado a Venezuela.

 

o  La guerra comercial con China ha sido desastrosa para muchos sectores de la economía norteamericana  y con resultados prácticos  de dudosa utilidad, menoscabando las relaciones multilaterales que se han ido organizando por largos años  a través de la Organización Mundial del Comercio (OMC)

 

o  Trump sacó a los Estados Unidos del  acuerdo multilateral con Irán sobre su desarrollo nuclear (que incluye a Francia, China, Rusia, Inglaterra y Alemania) y le reimpuso sanciones económicas. Pareciera que la razón fue básicamente porque lo firmó Obama, pero cuál es la  política alternativa para contener a Irán? No existe. Por otra parte, siguiendo en el medio oriente,  el alinearse con el gobierno israelí de manera incondicional no parece ser una política que a largo plazo pueda dar frutos para resolver en nudo gordiano de problema palestino.

 

o  Su política de acercamiento con Corea del Norte, con tres cumbres con el sanguinario Kim Jong Un, no han reducido  para nada el peligro nuclear que ese país representa pero le han dado legitimidad a un líder que obtuvo el poder de manera hereditaria y al que el propio Trump no deja de alabar a pesar del historial de atrocidades de él y su familia.

 

o  La implícita complicidad con Putin, al que le cree más que  a su aparato de inteligencia, y al que no ha confrontado en ningún terreno no deja de ser escandaloso y sospechoso. Rusia ha desarrollado su agresiva política  exterior sin ningún contrapeso.

 

o  Quizás uno de los rasgos más distintivos de la política exterior de Trump,  que no esconde su admiración por líderes dictatoriales como Putin, Erdogan y Kim Jong Un, pero ataca a los líderes de los países democráticos y  tradicionalmente aliados como Canadá, Francia y Alemania. Su tentación autoritaria es más que evidente.

 

Así  pues, de resultar electo el 3 de Noviembre Trump  tendría una agenda prácticamente desconocida tanto en política domestica como en política exterior. Lo que sí es claro que la democracia norteamericana seguirá sufriendo sus embates populistas y antidemocráticos y no sabemos a ciencia cierta cuanto más los podrá resistir…

 

 

 

Wilfredo Urbina Romero

 

Opiniones de los arttículistas son de su propia responsabilidad y no comprometen a la linea del portal Confirmado.com.ve

 

 

Comparte esta noticia:

Contáctanos

Envíe sus comentarios, informaciones, preguntas, dudas y síguenos en nuestras redes sociales

Publicidad

Si desea obtener información acerca de
cómo publicar con nosotros puedes Escríbirnos

Nuestro Boletín de noticias

Suscríbase a nuestro boletín y le enviaremos por correo electrónico las últimas publicaciones.