La obesidad es catalogada por la Organización Mundial de la Salud como una enfermedad, y se calcula que existen más de 40 millones de niños con sobrepeso en el mundo. Sus efectos negativos sobre la salud del infante son múltiples y pueden llegar a arrastrar consecuencias en la adultez.
Existe una gran población infantil con problemas de sobrepeso y obesidad en el mundo. 35 millones de niños con este problema viven en países en desarrollo, según indica un anuario de la Organización Mundial de la Salud para 2010. De allí que comer de forma adecuada sea importante para la salud infantil. No se trata solamente de evitar el exceso de chucherías, sino de alimentarse de manera balanceada y nutritiva.
Ser víctima de acoso escolar, tener baja autoestima, sufrir de apnea del sueño, padecer de enfermedades cardiovasculares (hipertensión, accidente cerebrovascular e infartos), diabetes, alteraciones de las grasas en la sangre (colesterol y triglicéridos elevados), dificultad para respirar, acentuación de desviaciones de columna, aumento de lesiones en articulaciones padecimiento de pie plano, así como de enfermedades de la piel y alteraciones hepáticas son solo algunas de las consecuencias psicológicas y fisiológicas que la acumulación anormal o excesiva de grasa puede provocar en un infante.
La causa fundamental de la obesidad es un desequilibrio energético entre las calorías consumidas y las gastadas, aunque algunos fármacos como los esteroides y los utilizados en quimioterapia para combatir el cáncer también pueden provocar aumento de peso. Anabel Mejías, endocrinóloga pediatra del Hospital Domingo Luciani y de la Unidad de Endocrinología para Niños y Adolescentes (UNIENDO), explica que “estos tipos de terapias modifican el metabolismo de los infantes, favoreciendo la retención de líquidos, aumentando el apetito y el riesgo de padecer hiperglicemia. También existe un componente genético que incrementa la predisposición de padecer de obesidad, sin embargo, son los malos hábitos de alimentación y el sedentarismo los que finalmente marcan la pauta en la gran mayoría de los pacientes”.
Fuente: Estetica y Salud