El secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin, aseguró este viernes que la muerte en prisión del opositor ruso Alexéi Navalni, anunciada este viernes por las autoridades rusas, es un hecho que causa «asombro» y «dolor».
«Lo siento mucho. Pensé que esto podría haberse resuelto de otra manera. En cambio, esta noticia nos asombra y nos llena de dolor”, afirmó Parolin sobre el fallcimiento del disidente ruso, según el portal oficial «Vatican News».
Al ser preguntado sobre si la muerte de Navlani cambiaba la posición de la Santa Sede respecto a Rusia, Parolin dijo: «Es prematuro decir estas cosas… Acabamos de enterarnos”.
Navalni, de 47 años, murió hoy de manera repentina en la prisión ártica en la que se encontraba desde diciembre pasado, según informaron los servicios penitenciarios de Rusia.
La comunidad internacional acusó al Gobierno de Vladímir Putin de acabar con la vida del dirigente opositor, una postura que el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, tachó de «inadmisible».
La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, con sede en Ginebra, expresó su consternación y reclamó a Rusia que «termine con la persecución de políticos, defensores de derechos humanos y periodistas» y añadió que «si una persona muere bajo custodia del Estado hay que presuponer que el Estado es responsable».
EFE