Las exportaciones petroleras de Venezuela acumulan un incremento de 11% en los primeros cuatro meses de 2023, pero los ingresos petroleros marcan una tendencia diferente, debido a la caída de 21% del precio promedio del crudo Merey 16, la mezcla que sirve de referencia de mercado para PDVSA.
El Merey 16 es, de hecho, el petróleo de menor valor en la cesta OPEP y uno de los que se ha visto más golpeado cuando hay descensos en el mercado. PDVSA vendió una cifra estimada en 4.000 millones de dólares en el primer cuatrimestre de este ejercicio, 786 millones o 16,4% menos que en el mismo lapso de 2022, según datos obtenidos por el portal especializado Petroguía.
Estos recursos representan cerca de 30% de la meta que se estableció el ministro de Petróleo y presidente de PDVSA, Pedro Rafael Tellechea, de percibir recursos por el orden de 13.388 millones de dólares durante todo este año.
La reducción no es mayor por la contribución que están realizando las empresas mixtas, en las que participa la estadounidense Chevron, principalmente por sus operaciones en Petropiar y Petroboscán, dice la fuente especializada.
La data de PDVSA, por concepto de exportaciones, arroja un promedio sobre los 659.000 barriles diarios, aunque los niveles de marzo y abril han estado por encima de los 700.000 barriles por día, tendencia que de mantenerse junto con el actual nivel de precios podría mejorar la percepción de ingresos.
Recientemente, Tellechea presentó un plan de mejoramiento de la infraestructura y estabilización de las operaciones en el que rescata la meta de alcanzar una producción promedio de 1.000.000 de barriles por día, una expectativa que su ahora cuestionado antecesor, Tareck El Aissami, no pudo alcanzar.
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