El Ministerio Público acusó a Albanis Segundo Machado (21) y a Cesar Parra González (22), por su presunta responsabilidad en la muerte de cinco personas y las heridas causadas a dos mujeres y un hombre, hecho ocurrido el pasado 27 de mayo de 2013 en un establecimiento comercial ubicado en la población de Pueblo Nuevo – El Chivo, parroquia Simón Rodríguez, municipio Francisco Javier Pulgar, estado Zulia.
Las víctimas mortales fueron identificadas como Randor Romero (30) quien era funcionario activo de la policía municipal de Francisco Javier Pulgar; Jhoandry Montiel (24), Neira Gutiérrez (18), Jhoandry Murillo y un adolescente de 16 años de edad; mientras que los heridos fueron: María Galué (19); María del Rosario Vilchez (25) y Gerkys José Garrido (26); todos empleados del local comercial.
Los fiscales 48º nacional; 16° y auxiliar de esa jurisdicción, Víctor Hugo Barreto, Robert Martínez y Danice Cepeda, respectivamente, acusaron a los dos jóvenes por la presunta comisión de los delitos de homicidio calificado en perjuicio de los cinco fallecidos; homicidio calificado frustrado contra las tres personas; porte ilícito de arma de fuego, robo agravado y aprovechamiento de cosas provenientes del delito, previstos y sancionados en el Código Penal.
En el escrito presentado ante el Tribunal 2º de Control de Zulia, los fiscales solicitaron la admisión de la acusación, el enjuiciamiento de Segundo y de Parra y que se mantenga la medida privativa de libertad para los jóvenes, quienes se encuentran recluidos en el Centro de Arrestos y Detenciones Preventivas de San Carlos del Zulia.
El 27 de mayo, varios hombres armados ingresaron al local comercial cuando estaban a punto de cerrarlo y dispararon contra los empleados, incluyendo al policía Randor Romero, quien además era el encargado del local.
Luego de dispararles a las ocho personas, robaron el dinero de la caja registradora, el arma de reglamento del policía, otros objetos de valor y huyeron del sitio en una moto.
Enseguida llegó otra empleada quien llamó a la policía municipal y al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), quienes bajo la coordinación del Ministerio Público iniciaron la investigación.
El 29 de mayo, los funcionarios del Cicpc observaron a dos personas que se trasladaban en una moto en el kilómetro 12 de la carretera Santa Bárbara- El Vigía, quienes trataron de evadir la unidad del cuerpo detectivesco, pero pudieron ser interceptados.
Cuando los funcionarios les practicaron la inspección corporal, les fueron detectadas dos armas de fuego, que al ser verificadas a través del Sistema de Investigación e Información Policial, se constató que una de ellas pertenecía al funcionario policial ultimado en el local comercial. De inmediato Segundo y Parra fueron aprehendidos y puestos a la orden del Ministerio Público.
Fuente: Globovisión
