El director regional del Servicio Autónomo de Contraloría Sanitaria (Sacs), Reny Valdez, advirtió a la población sobre el posible uso del pesticida hecho a base de dicloro difenil tricloroetano (DDT).
Indicó que la sustancia química se usaba para fumigar, pero en la actualidad fue sacada del mercado porque resultó dañina para los seres humanos.
“Las empresas privadas que prestan el servicio de fumigación tienen que estar seguros de no usar ese veneno porque puede ocasionar problemas de salud”.
Agregó que los insecticidas utilizados deben ser de salud pública y no para atacar plagas del sector agrícola.
Destacó que las empresas deben entregar un recibo a sus clientes, en el que se especifique el pesticida usado y el respectivo antídoto para atacar posibles reacciones alérgicas de manera específica.
“Si una persona reacciona de mala forma a un veneno de fumigación, en la clínica o ambulatorio donde la reciban se debe saber con precisión qué fue lo que le causó el problema, para poder atacarlo de la forma más adecuada”.
Registro
Valdez detalló que en la entidad hay 40 empresas privadas registradas que se dedican a ese negocio, de las cuales 16 deben renovar su licencia sanitaria, para prestar el servicio.
“Tienen que venir a Ingeniería Sanitaria, en la sede de Salud Pública en Barcelona, para ponerse a derecho. De lo contrario, están trabajando fuera del marco legal”.
Dijo que el hacer fumigaciones sin tener los papeles en regla trae consecuencias administrativas.
Fuente: El Tiempo
