Desde la mañana hasta el anochecer, el candidato a la gobernación del Zulia Manuel Rosales recorrió las parroquias emblemáticas de las comunidades indígenas de Maracaibo.
Rosales en su contacto cara a cara oyó testimonios sobre cortes eléctricos de 12 horas, paralización del sistema de salud, ruinas de escuelas y caos en el transporte público.
Con motivo del 12 de octubre, el candidato de la plataforma unitaria y Rafael Ramírez, abanderado a la alcaldía de Maracaibo, se adentraron por calles y veredas donde eran recibidos con especial afecto.
“Gracias a las comunidades indígenas por tanto amor”, dijo Rosales en una cancha abandonada de la parroquia Venancio Pulgar, donde se comprometió a rescatarla tan pronto asuma el ejecutivo regional.
También Ramírez prometió una recolección de basura puntual y coordinada con los habitantes del área.
Respecto a los apagones prolongados, Rosales hizo un comentario desde la parroquia Ildefonso Vásquez. “Por ahí me informaron que el destructor del Zulia ofreció colocar transformadores donde tenían meses sin luz. Y lo peor es que lo dicen como si se tratara de un gran favor. Yo desde aquí le digo que eso es un abuso. Se aparece con un transformador ahora porque está desesperado. La gente lo va a sacar el 21 de noviembre, por eso es que se oyen gritos de cambio por todo el Zulia”.
En Ziruma, Rosales y Ramírez fueron arengados con ovaciones. “Es un compromiso ya suscrito, el 21 de noviembre comenzará el gran cambio para Ziruma y sus alrededores”, resaltó Ramírez.
Ya en la noche del martes, grupos de jóvenes esperaban a Rosales y Ramírez para nuevas reuniones de planificación rumbo a las elecciones del 21 de noviembre.