Este año parece ser el año de las tormentas eléctricas, con relámpagos y rayos cayendo en diferentes lugares de nuestro país. Pero hay un lugar donde este fenómeno parece ser algo más habitual.
Se trata del relámpago de Catatumbo, un singular fenómeno meteorológico que sucede en la cuenca del lago de Maracaibo, sobretodo en la zona sur de dicho lago y en la cuenca inferior del río Catatumbo en Venezuela.
Todavía no existen hipótesis confirmadas acerca de este fenómeno. Quienes han podido presenciarlo lo definen como una sonrisa de la noche, las luces emergen del mar y finalizan en él.
La “lluvia de relámpagos” tiene una recurrencia nocturna de entre 8 y 9 horas y acontece entre 140 a 260 noches al año. Los expertos sostienen que 10 minutos de este fenómeno generan la energía necesaria para encender todas las lámparas de Sudamérica.
La historia demuestra que la aparición de este suceso servía de guía a los primeros exploradores de la zona hace más de 500 años. A los pescadores les ayuda en su labor, ya que por la aparición de las luces en el cielo, y su reflejo en el mar, se reúne una gran cantidad de peces.
El relámpago de Catatumbo se puede ver en una zona protegida, el Parque Nacional La Ciénaga de Juan Manuel. Este es un ecosistema único en el mundo que aparentemente intervendría en la producción de los rayos por la emanación de gas metano desde sus pantanos.
El fenómeno en sí se produce en nubes de gran desarrollo vertical, por lo cual las descargas eléctricas se dan entre los 2 y 10 kilómetros de altura. En ciertos momentos pueden producirse hasta 60 descargas por minuto. El desarrollo vertical de las nubes en esta región se origina por un efecto orográfico, las cordilleras encierran y frenan a los vientos del noreste. Estos penetran en la superficie del lago en horas de la tarde y son obligados a ascender por el sistema montañoso del Perijá y la cordillera de Mérida.
La gran cantidad de descarga eléctrica que genera produce una elevada cantidad de ozono, por lo cual es considerado el fenómeno natural más importante del mundo por la densidad energética y su impacto protector de la capa de ozono.
Esta impactante muestra de la naturaleza ha contribuido a que la zona se desarrollara como un punto de interés turístico y científico, así como también de protección ambiental.
Fuente: Los Porque
