El director ejecutivo de la Futpv exhortó al presidente Maduro a escuchar a los obreros petroleros para que la situación de la empresa sea otra.
Eudis Girot, director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), aseguró este martes que en la actualidad la industria produce 2,4 millones de barriles de petróleo por día, un millón de barriles menos que antes de 2008.
En el programa Primera Página que trasmite Gobovisión, explicó que cuando el presidente Nicolás Maduro escuche a los obreros petroleros la principal industria del país será otra. Advirtió que el primer mandatario solo escucha a los gerentes y a quienes están en altos cargos.
Girot indicó que han venido solicitando un derecho de palabra con el ministro Eulogio Del Pinopara debatir el tema, sin recibir algún tipo de respuesta.
Girot denunció que el trabajador petrolero devenga apenas 3.200 bolívares semanales, «la situación es penosa». Manifestó que han venido denunciando el incumplimiento de la convención colectiva por parte José Gregorio Villarroel, gerente corporativo de las relaciones laborales, y a Wills Rangel, representante de Futpv.
Recordó que en Pdvsa también debe realizar una auditoría, pues considera que existe despilfarro en la estatal petrolera. Además reiteró sus denuncias sobre la situación de los terminales de embarque y la necesidad de intervenirlos.
Próximas elecciones de la Federación
El vocero gremial denunció que para las próximas elecciones de ese sindicato se está montando un “megafraude”.
“Si no se desmota, iremos a la calle para defender nuestros derechos”, recalcó, al tiempo que recordó que la Futpv tiene una mora de dos años.
Girot indicó que los trabajadores que cotizan a las organizaciones sindicales están siendo excluidos del padrón electoral y les están negando el derecho a participar a cerca de 30 mil trabajadores en todo el país.
Declaró también que la comisión electoral incluye a 17 mil trabajadores que no pertenecen a la industria, con el fin de favorecer a Will Rangel, quien «sabe que está perdido y que única manera de ganar es controlar la comisión electoral, porque las encuestas le dan apenas un 6% de aceptación entre los trabajadores».
Emen
