Posts Tagged ‘ac11’

« Anterior | Siguiente »

Las siamesas Pertuz serán separadas este jueves 30 de mayo

Posted on: mayo 30th, 2019 by Laura Espinoza No Comments

Para este jueves 30 de mayo se tiene prevista la cirugía de separación de Ana Ruth y Ana Saray Pertuz, las siamesas unidas desde el tórax hasta el ombligo (tocacopago) y que comparten el hígado, el diafragma y el pericardio.

 

 

En el Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (Sahum) se realizará la operación de manos de más de 30 especialistas de múltiples áreas pediátricas.

 

 

Hasta el momento, hay hermetismo de información oficial sobre el tema, pero PANORAMA conoció que este miércoles 29 de mayo se efectuó un simulacro médico, como antesala al procedimiento, el segundo de este tipo, pues en marzo de 2007, en ese centro de salud también separaron a María Fernanda y María Victoria Alarcón Arroyo, otras siamesas nacidas el 5 de octubre de 2006.

 

 

Ana Ruth y Ana Saray llegaron al mundo el 16 de septiembre de 2018 en el Materno Belloso Chacín, de San Francisco, y su condición resultó una sorpresa para su mamá, Daniela Pertuz, quien aseguró haber cumplido con el control prenatal.

 

 

La expectativa de vida luego de practicarles esta intervención “es 100% positiva (…) tienen muy buen pronóstico”.

 

 

Panorama

Médicos venezolanos temen brotes epidémicos letales

Posted on: mayo 29th, 2019 by Laura Espinoza No Comments

Los ladrones llegaron al Instituto de Medicina Tropical, en el centro de Caracas, desde un bosque cercano.

 

 

Una vez adentro del complejo, que es parte de la Universidad Central de Venezuela (UCV), se dedicaron a lo suyo, dejando atrás pisos llenos de desechos, vidrios rotos y puertas destrozadas. Se llevaron medicamentos, computadoras, impresoras, microscopios, cables, equipo de laboratorio y acondicionadores de aire.

 

 

Pero también se llevaron animales de laboratorio, como conejos, ratones y pollos inoculados con parásitos y bacterias.

 

 

“Quién sabe lo que le haya pasado a esas personas. Quizás se enfermaron o pusieron a otros en peligro si vendieron los animales”, dijo la Dra. Nahir Martínez, de 50 años, jefa del Departamento de Virología del instituto, el mayor y más prestigioso del país. Mientras recorría la zona desolada del instituto donde antes estaban los animales, la preocupación se le marcaba en el rostro.

 

 

El reciente robo, uno de una docena ocurridos en el instituto en los últimos años, muestra lo que los venezolanos desesperados están dispuestos a hacer para sobrevivir en un país plagado por la amplia falta de alimentos, medicinas y productos básicos.

 

 

Sin embargo, lo peor de los robos fue que se llevaron computadora donde se almacenaba información nacional sobre posibles zonas de brotes virales, bases de datos de pacientes infectados y otros registros vitales.

 

 

Con la falta de información actualizada sobre casos virales, estos incidentes son otro golpe a la comunidad de médicos, científicos e investigadores que tratan de evitar la posibilidad real de un brote epidémico letal.

 

 

En Venezuela, con su diverso ecosistema, un rango de temperatura ideal y migración humana, hay toda clase de agenes infecciosos. Los expertos saben que cualquier propagación puede controlarse con el seguimiento estricto de normas sanitarias e información al público.

 

 

“Todo esto ha fallado en años recientes, y cuando tomamos en cuenta la falta de medicamentos, de agua potable, la mala dieta y los robos, es un coctel explosivo”, dijo el Dr. Oscar Noya, de 67 años y el principal experto en malaria en la UCV.

 

 

Noya señala la malaria como un posible brote catastrófico. Según el médico, la cantidad cada vez mayor de casos de malaria ya es alarmante. En 1961, Venezuela fue el primer país del mundo en erradicar esta mortal enfermedad, propagada por los mosquitos. Pero ahora pudiera haber 2 millones de personas que sufren de síntomas de malaria, estima Noya.

 

 

“Temo que cualquier enfermedad infecciosa pudiera propagarse por toda Venezuela en este momento”, dijo.

 

 

Pero el Dr. Noya no es el único con esa opinión. El Dr. Julio Castro, de 55 años y otro destacado experto en enfermedades infecciosas, está profundamente preocupado de que en Venezuela se repita lo que sucedió en Haití en 2010.

 

 

Ese año, Haití fue devastado por un terremoto en que perecieron más de 300,000 personas, según cifras del gobierno, y menos de un año después de la tragedia, se desató un brote de cólera que dejó 10,000 fallecidos más.

 

 

“El cólera en Venezuela, en la misma escala de Haití en 2010, me asusta mucho”, dijo Castro, quien también trabaja en el Instituto de Medicina Tropical.

 

 

Los venezolanos batallan con apagones y escasez de agua persistentes, y al igual que los haitianos, ahora se bañan, lavan los platos, beben y hacen sus necesidades en ríos cercanos, condiciones ideales para que una enfermedad infecciosa se propague, dijeron expertos.

 

 

Según los especialistas, otra preocupación son las cañerías secas en ciudades y poblados, que ofrecen refugio a ratas, cucarachas y otros animales, exponiendo las viviendas al agua contaminada una vez que se restablece el servicio.

 

 

“Todos en Venezuela deben hervir siempre el agua”, dijo Noya.

 

 

Los médicos culpan con frecuencia al gobierno de la falta de información sobre la prevención de enfermedades. El régimen de Nicolás Maduro no publica cifras de salud pública, de la misma manera que hace sobre estadísticas accesibles en materia de inflación y delincuencia. El Dr. Castro dice que eso es un “apagón informativo” para evitar que la población y el mundo no sepan lo que ocurre en Venezuela.

 

 

El Dr. Castro trata de mantener a los venezolanos informados a través de canales alternativos. El especialista ha creado una red de comunicación de 40 hospitales en todo el país, desde donde colegas le envían las noticias y tendencias más recientes en sus respectivas regiones y le ofrecen sus propias observaciones y pronósticos.

 

 

El Dr. Castro también monitorea lo que se dice en las plataformas de redes sociales, como Twitter y Google Trends para identificar el uso excesivo de palabras como dolores de cabeza, vómitos y temblores, que pudieran apuntar a un brote de virus o bacterias en una zona particular.

 

 

Una vez que recopila toda la información posible, publica actualizaciones en la página digital del Instituto de Medicina Tropical y otros portales, algo que hace una vez a la semana.

 

 

Sin embargo, a los epidemiólogos les sigue preocupando que un brote potencial no pueda atajarse a tiempo y resulte muy difícil de controlar.

 

 

La Dra. Martínez, la viróloga, comparte esta preocupación. Ahora, como resultado de los robos en el instituto, no puede diagnosticar muchas enfermedades virales como el zika, la chikunguña y el mayaro.

 

 

“Aquí en el Instituto somos la última línea de defensa, pero cada vez podemos hacer menos”, dijo. “Muchas veces solamente tenemos una sensación de lo que pudiera ocurrir allá afuera”.

 

 

El Nuevo Herald

Desde Colombia, desertores venezolanos quieren «liberar» a su patria

Posted on: mayo 28th, 2019 by Laura Espinoza No Comments

Vistiendo camisetas de camuflaje y botas de combate, un grupo de milicia venezolana forma en la ciudad colombiana de Cúcuta mientras su comandante, un sargento retirado, habla de planes para tomar ciudades al otro lado de la frontera antes de ir a Caracas para ayudar a derrocar al presidente Nicolás Maduro.

 

 

Ocho hombres, que se identificaron con exintegrantes de la policía, el ejército y servicios de inteligencia venezolanos, se reunieron cerca de la tensa frontera de los dos países, desde donde dijeron que liderarán un ataque destinado a derrocar a Maduro y entregarle el poder al líder opositor Juan Guaidó.

 

 

Tras hablar de la esbozada “Operación Venezuela”, el sargento retirado del ejército, Eddier Rodríguez, aseguró que hay alrededor de 150 hombres listos para participar con su grupo. Reuters no pudo confirmar de forma independiente el estatus de los ocho hombres ni el tamaño de la milicia.

 

 

“El objetivo es liberar a nuestro país”, dijo Rodríguez, de 37 años, quien asegura que en los últimos meses trabajó como guardia de seguridad privada en Bogotá. “Somos tropas que estamos dispuestas a dar la vida si es necesario, así sean los 150 que entremos”.

 

 

El grupo asegura que está abierto a recibir ayuda financiera y logística de gobiernos y particulares, aunque admite que hasta ahora sus llamados no han tenido éxito.

 

 

El Ministerio de Defensa de Venezuela y el Ministerio de Información no contestaron a una solicitud de comentarios sobre la formación de milicias en Colombia.

 

 

El director de fronteras del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, Víctor Bautista, dijo que cualquier grupo que tome las armas será considerado una organización paramilitar y las autoridades capturarán a sus integrantes.

 

 

“Alguna actividad de tipo militar sería de total ilegalidad en nuestro territorio y serían obviamente judicializadas las personas”, explicó Bautista.

 

 

Un oficial del ejército colombiano, que solicitó no ser identificado, admitió que la inteligencia militar conoce de la existencia de grupos de milicias venezolanas y no descartó que planeen volver a cruzar la frontera hacia su país.

 

 

Las autoridades de Colombia dicen que no han hecho nada contra los integrantes del grupo porque hasta ahora no han cometido ningún delito en su territorio. Por separado, un funcionario de alto nivel del gobierno que pidió no ser identificado advirtió que podrían ser procesados por porte ilegal de armas y la conspiración para cometer un delito.

 

 

CRECIENTE NÚMERO DE DESERTORES

 

 

El Gobierno de Colombia sostiene que apoya todo esfuerzo diplomático para presionar la salida de Maduro, sin involucrarse en una acción militar.

 

 

Se estima que 1,2 millones de venezolanos llegaron a Colombia en los últimos años huyendo de una dolorosa recesión e hiperinflación que ha dejado a millones de personas enfrentando hambre y escasez de productos básicos.

 

 

La cifra incluye un creciente número de desertores de las fuerzas armadas venezolanas, algunos de los cuales están formando milicias para presionar por una salida de Maduro.

 

 

Si bien esas milicias son casi insignificantes frente a los 150.000 efectivos del ejército de Venezuela, los hombres dijeron a Reuters estar dispuestos a enfrentar cualquier consecuencia si pueden liberar a su país de Maduro, poniendo de manifiesto la frustración y desesperación de muchos emigrantes venezolanos.

 

 

Guaidó invocó en enero la Constitución para proclamarse presidente interino con el argumento de que las elecciones en las que Maduro fue reelegido el año pasado fueron fraudulentas.

 

 

El líder opositor ha solicitado a las Fuerzas Armadas de Venezuela que se vuelvan contra el gobierno de Maduro.

 

 

Estados Unidos y la mayoría de las naciones occidentales reconocieron a Guaidó como líder de la nación petrolera, pero Maduro lo acusa de ser un títere de Washington y un golpista. Maduro tiene la lealtad de la cúpula de las Fuerzas Armadas.

 

 

Rodríguez dijo haber sostenido reuniones con diferentes grupos de “resistencia” que buscan ayuda para entrar a Venezuela, aunque no proporcionó mayores detalles de cómo planeaban cruzar la frontera y lanzar un ataque.

 

 

El grupo dice que espera recaudar fondos para comprar armas, municiones, explosivos, chalecos antibalas, comida y agua para su operación, pero hasta ahora sólo han conseguido unas pistolas, aseguró Rodríguez, quien no reveló como las obtuvo.

 

 

El presidente colombiano, Iván Duque, reconoce a Guaidó como el legítimo presidente de Venezuela y califica a Maduro como un “dictador”. Maduro rompió relaciones diplomáticas con Bogotá luego de que Duque respaldó los esfuerzos de la oposición por llevar a Venezuela ayuda humanitaria donada por Estados Unidos.

 

 

Más de 1.400 efectivos de las Fuerzas Armadas de Venezuela desertaron y huyeron a Colombia desde que las tropas de Maduro impidieron en febrero el ingreso de la ayuda humanitaria.

 

 

REFLEJO DEL DESCONTENTO

 

 

La oposición venezolana tiene un acuerdo para que Colombia proporcione a los desertores alimentación, alojamiento y capacitación laboral.

 

 

Los gastos de alojamiento y alimentación de los militares venezolanos que desertaron son pagados por el Gobierno de Colombia y la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados, según fuentes gubernamentales colombianas.

 

 

En una entrevista con Reuters en Caracas, Guaidó dijo que, si alguien decide tomar las armas, se debe a la negativa de Maduro a aceptar elecciones presidenciales libres y justas.

 

 

“Esto refleja el descontento que hay en las fuerzas armadas: soldados buscando alternativas y soluciones porque Maduro ha cerrado la opción electoral”, afirmó el líder de la oposición.

 

 

Guaidó no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la advertencia de funcionarios colombianos, en el sentido de que quienes tomen las armas serán detenidos.

 

 

Maduro insiste en que la votación presidencial del año pasado fue justa y considera a los soldados desertores como “traidores”.

 

 

El 30 de abril Guaidó intentó reunir a las Fuerzas Armadas de Venezuela para alzarse contra Maduro, pero sólo unas pocas docenas de soldados y un funcionario del gobierno desertaron. El alto mando militar reafirmó su lealtad a Maduro.

 

 

A lo largo de los años, Maduro y el fallecido expresidente Hugo Chávez ganaron el apoyo de las Fuerzas Armadas promoviendo a cientos de oficiales al rango de general y poniéndolos en puestos en entidades del Estado, como la petrolera PDVSA.

 

 

El equipo de Rodríguez dice que ha contactado guarniciones en Venezuela y muchos están listos para luchar una vez que comienza la operación. Reuters no pudo verificar independientemente esta información.

 

 

“Ya tenemos conversaciones con personas que están dentro de las guarniciones, que están esperando solamente que nosotros entremos para disponer de los destacamentos que queremos tomar. Queremos hacerlo de una manera totalmente precisa, con el menor derramamiento de sangre posible”, dijo Pedro Meneses, quien se identifica como líder político y logístico del grupo.

 

 

El sargento retirado Efrén Fernández, quien hace parte de un grupo de desertores venezolanos alojados en un hotel de Cúcuta, dijo a Reuters que él y sus hombres están listos para luchar por Guaidó.

 

 

“Señor presidente Guaidó cuente con nuestro apoyo, aquí están sus soldados prestos para la batalla, para el combate. Estamos listos para prepararnos con las armas que nos den para liberar nuestra patria”, declaró Fernández quien dijo que solo espera la orden del jefe de la oposición venezolana.

 

 

REUTERS

El Zulia vivió un fin de semana trágico sin servicio eléctrico

Posted on: mayo 27th, 2019 by Laura Espinoza No Comments

Maracaibo y el resto de los municipios del estado Zulia, padecieron un fin de semana de prolongados cortes, la mayoría de los sectores solo tuvo servicio eléctrico unas tres horas al día. No hubo ninguna información oficial acerca de estos prolongados cortes.

 

 

Desde el apagón nacional del 7 de marzo, en el Zulia no se ha registrado ninguna mejoría en el servicio, ni tampoco se aplica el cronograma 6×6 que ideó la Gobernación.

 

 

La Corporación Eléctrica Nacional, Corporlec, informó este lunes 27 de mayo a través de su cuenta Twitter que se registró una avería en los circuitos de Adolfo Pons y El Rosal, en Maracaibo.

 

 

“En estos momentos se registra avería en los circuitos Adolfo Pons y El Rosal. Nuestro personal operativo de encuentra realizando las labores correctivas para restablecer el servicio a la brevedad posible”.

 

 

Panorama

Motín en Acarigua dejó 29 muertos y más de 19 heridos

Posted on: mayo 24th, 2019 by Laura Espinoza No Comments

Al menos 29 personas murieron este viernes y 19 más resultaron heridas en un motín carcelario en el estado venezolano de Portuguesa (centro) del que todavía no se conocen detalles y que había arrojado un primer balance de tres fallecidos, informó a Efe una fuente del Ministerio Público (Fiscalía).

 

 

Los datos que manejan las autoridades han ido actualizándose conforme pasan las horas y avanzan las investigaciones del caso que se registró en los calabozos de la Comandancia General de la Policía en Acarigua, que forma parte del municipio Páez.

 

 

Hasta ahora ninguna autoridad ha ofrecido públicamente más detalles sobre el caso.

 

 

El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), una organización no gubernamental que defiende a los reos, ha responsabilizado de este hecho al Ministerio de Servicios Penitenciarios, creado en 2011 por el Gobierno para atender los problemas del sector y encabezado por Iris Valera.

 

 

A través de la red social Twitter, el OVP ha denunciado una “masacre” en el lugar y asegura que todos los fallecidos eran prisioneros.

 

 

El 29 de marzo de 2018 se registró uno de los motines más graves de Venezuela en el último cuarto de siglo. Se trató de un enfrentamiento en el centro de reclusión de la Policía Estatal de Carabobo (norte), donde 68 personas perdieron la vida en el incendio desatado tras la reyerta.

 

 

Cerca de una decena de disputas carcelarias han dejado decenas de fallecidos en el país en la última década, cuando se inició la peor crisis económica.

 

 

El OVP ha denunciado el hacinamiento de los centros de reclusión de Venezuela, tanto en cárceles como en calabozos estatales y municipales, que albergan aproximadamente a 85.000 personas, y que ha degenerado en el incremento de la violencia.

 

 

Los datos de la ONG aseguran que los centros penitenciarios bajo el control del Ejecutivo venezolano tienen una capacidad de 35.562 y la población reclusa es de 54.738.

 

 

La información del OVP, sin embargo, no coincide con los datos oficiales del Ministerio Penitenciario que asegura que en Venezuela existe una población de 54.116 reclusos y una capacidad de ocupación penitenciaria de 82.736. EFE

Metro de Caracas sufrió retraso tras ingreso de usuario a las vías

Posted on: mayo 23rd, 2019 by Laura Espinoza No Comments

El Metro de Caracas presentó un fuerte retraso este jueves luego de que dos antisociales accedieran a los rieles del sistema.

 

 

El hecho ocurrió aproximadamente a las 6:50 de la mañana. Los antisociales asaltaron a los pasajeros de un tren en la estación Dos Caminos y huyeron a través del túnel por sobre los rieles del sistema. Eso generó un fuerte retraso en la línea 1, sentido Palo Verde.

 

Mientras los antisociales huían, los pasajeros del sistema Metro permanecieron dentro de los vagones varios minutos.

 

 

Venezuela al día

Afirman que Cantv y Movilnet están al borde de un «cierre técnico»

Posted on: mayo 22nd, 2019 by Laura Espinoza No Comments

El presidente del sidicato de trabajadores de Cantv, Juan Veliz, aseguró que si la estatal de telecomunicaciones, al igual que Movilnet «no hacen las inversiones, es posible un colapso o un cierre técnico”.

 

 

Resaltó la situación precaria que presentan en los diferentes aspectos ambas compañías de telecomunicaciones: “Cantv y Movilnet muestran una tecnología obsoleta, desmantelamiento de equipos, ni siquiera los aires acondicionado funcionan. Hemos ido retrocediendo, los 12 años de estatización nos ha traído desinversión”.

 

Resaltó que al menos 6.000 trabajadores han tenido que partir de la empresa debido al estancamiento que presentan: «Tenemos una empresa estancada, no tenemos ni siquiera para mantener la cartera de clientes. Nunca había pasado que no había luz y se perdía el servicio, eso es por la desinversión».

 

 

Comentó que se ha realizado la petición de un ajuste de tarifas para poder mantener operativa la planta: “Los usuarios están pagando por un mal servicio. No hay cables para sustituir, hacer mantenimiento correctivo y preventivo”.

 

 

El Impulso

Bloque ALBA insta a que EEUU ponga fin a su «amenaza militar» contra Venezuela

Posted on: mayo 21st, 2019 by Laura Espinoza No Comments

El bloque izquierdista ALBA pidió el martes que Estados Unidos que ponga fin a lo califica como una “amenaza militar” contra Venezuela, en momentos en que el país petrolero atraviesa una profunda crisis económica y política.

 

 

La Alianza Boliviariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), un mecanismo de cooperación fundado en 2004, enfrenta nuevos desafíos tras el giro a la derecha de la mayoría de las naciones de América Latina y el Caribe.

 

 

“Desde La Habana hacemos un llamado a Estados Unidos a la diplomacia, al diálogo, al entendimiento (…) a que cese la amenaza militar, el bloqueo contra Venezuela”, dijo el canciller venezolano, Jorge Arreaza, en la apertura de la reunión.

 

 

Washington ha aplicado una serie de sanciones contra Venezuela, incluyendo a sus autoridades, bancos y el sector energético, con los que busca asfixiar al Gobierno socialista del mandatario Nicolás Maduro y a su aliado Cuba.

 

 

Estados Unidos respalda al líder opositor venezolano Juan Guaidó, quien en enero se proclamó presidente encargado del país afirmando que la reelección de Maduro se dio en elecciones “fraudulentas”.

 

 

El bloque del ALBA está formado por Bolivia, Nicaragua, Cuba, Venezuela y otras pequeñas naciones del Caribe.

 

 

REUTERS

El País: Maracaibo, la zona cero del colapso de Venezuela

Posted on: mayo 20th, 2019 by Laura Espinoza No Comments

La  palabra lo envuelve todo: luz. Cada conversación, cada rutina en Maracaibo gira en torno a la falta de electricidad. A ella están vinculados el suministro de agua, el consumo de gasolina, la conservación de alimentos, la distorsión de la vida de cientos de miles de personas. La segunda ciudad de Venezuela, emblema hace décadas del auge petrolero, la capital de los excesos, es hoy el símbolo más tangible de la decadencia. Cuando unos apagones masivos dejaron en marzo al país a oscuras, aquí la crisis eléctrica no representó una novedad, pues se convirtió en una constante en 2017. Y no ha dejado de golpear a sus habitantes.

 

 

Hay un ecosistema de supervivencia que retrata ese colapso, que asfixia especialmente a las clases populares, y encapsula muchos de los males derivados de la desastrosa gestión económica del régimen, del tráfico de divisas a la venta ilegal de medicamentos, y que el chavismo achaca a la injerencia extranjera. Prosperó a orillas del lago, una de las mayores reservas de petróleo del mundo. A las once y media de la mañana del viernes, con una temperatura que supera los 30 grados y una sensación de calor que roza los 50, el hedor a carne podrida invade los pasillos del mercado de Las Pulgas. María Rivero, de 43 años, vende vísceras y patas de res. “La mayoría de los productos necesitan refrigeración y ¿qué pasa?, como se va la luz, la mercancía sale toda descompuesta”, lamenta. Aun así, logra colocar chunchurria (intestino delgado) a 4.000 bolívares el kilo. Esto es, la décima parte de un salario mínimo, que equivale a unos siete dólares. El mercado, que en septiembre del año pasado fue clausurado por las autoridades —pero volvió a funcionar— es una fotografía nítida de la informalidad. Casi nadie acepta billetes de cien, los de más baja denominación, mientras todos anhelan dólares y pesos colombianos.

 

 

“Ya he aprendido algo”, dice Daniel Romero, 25 años, sobre su negocio. Encima de una mesa, una variedad de pastillas sin etiquetar que proceden principalmente de Colombia, a menos de tres horas de carretera. Un blíster de píldoras anticonceptivas cuesta 2.500 bolívares. “No soy partidario ni de unos, ni de otros”, asegura sobre la confrontación entre Juan Guaidó y Nicolás Maduro. “Mejor no le digo, si no me pongo bravo. Pero sé que las cosas deben funcionar mejor”. Como a la mayoría de los pulgueros, le interesa el día a día. Salir adelante.

 

 

Desde el martes pasado muchos tienen una queja. La desaparición de la edición impresa del periódico regional Panorama, después de 104 años, les dejó huérfanos. Los apagones afectan a las comunicaciones y la conexión a Internet. La crisis eléctrica ahonda también en su aislamiento. A unos kilómetros de allí, en el exclusivo centro comercial Sambil las consecuencias de la falta de luz han dejado otro tipo de destrozos. Sus efectos son aparentemente menos impactantes, pero han acabado de devastar el tejido económico. Más de 500 establecimientos sufrieron saqueos en la ciudad. El 60%, según la Cámara de Comercio, tuvo una pérdida de tal calibre que impide o dificulta su reapertura. El ambiente del centro, que a mediodía se quedó sin electricidad, es casi fantasmal. Varias tiendas de firmas de moda europeas y tecnología asiática están cerradas o vacías. No hay forma de pagar el parking por la falta de luz, ya que la mayoría de las transacciones en Venezuela se realizan con tarjeta. El encargado se encoge de hombros.

 

 

La resignación se respira en toda la ciudad, que antes de que se disparara el éxodo hacia Colombia, tenía más de dos millones de habitantes. Aun así, muchos siguen mirando por el espejo retrovisor de un pasado de prosperidad que saben que no volverá, al menos a corto plazo. Maracaibo era conocida como la “ciudad más fría” del país por el uso masivo de aire acondicionado. Hoy, cada noche, una imagen preside los sectores residenciales, donde escasean los generadores. Muchas familias duermen en la puerta de sus viviendas, tenuemente iluminadas por mechurrios o lámparas de gas.

 

 

Inés de Davalillo vivió en su propia carne ese declive. Esta mujer, de 75 años, lo perdió casi todo, salvo el afecto de sus allegados. “A mi edad, yo no pensaba vivir esta vejez. No solo tenemos el problema de la luz. Es la salud, sobre todo. Soy diabética y tengo más de tres años sin inyectarme insulina. Primero porque no se consigue y segundo porque la que se consigue no está a mi alcance”, asegura. Recibe 18.000 bolívares de pensión. “Cómo me compro alimentos, cómo me compro una bolsa de leche. Yo estaba acostumbrada a ir a un supermercado y a comer lo que me gustaba. Siempre me he considerado una persona de clase media, podía viajar. Me ha tocado vivir toda la decadencia. Era una ciudad muy bella, ahora carecemos de camiones de aseo, porque aquí hay más basura que comida”, continúa. “Y así, como yo, ¿cuántos viejitos habrá en este país?”.

 

 

De Davalillo se declara opositora y partidaria de Guaidó. “A mi edad no creo que pueda abandonar mi país. Tengo la fe de que este cambio va a llegar pronto. Si tú eres mi vecino y de verdad eres mi amigo y en tu casa hay abundancia, yo creo que tú eres uno de los que me va a brindar una mano. Que alguien venga y nos quite lo que nos está haciendo daño”, dice en referencia a una intervención de EE UU o Colombia. Maduro culpa del colapso a la Administración de Donald Trump, que después de la proclamación de Guaidó impuso sanciones a la petrolera estatal, Petróleos de Venezuela (PDVSA). Aun así, el último informe de Transparencia Internacional recuerda que en el “país no existe un sector que esté libre de los hilos de la corrupción”. Y entre los negocios ilegales destaca la “operación Money Flight, un desfalco a PDVSA de 1.200 millones de dólares”, a los que se suman otros miles que, según las acusaciones, se llevó el exresponsable de la tesorería nacional Alejandro Andrade y las operaciones de blanqueo del ex viceministro de Energía Nervis Villalobos.

 

 

Atardece en Maracaibo. Un grupo de hombres se acerca a una cañería rota que ha formado un riachuelo en medio de los desechos. Ángel Vivas, de 51 años, camina más de un kilómetro para recoger un poco de agua y llevar unos contenedores a su casa. La utilizan principalmente para lavarse y algunos aseguran que se puede beber una vez hervida. El centro de primeros auxilios del Seguro Social del sector de Sabaneta opera sin luz, pero los principales hospitales de la ciudad, cuyos generadores eléctricos solo alcanzan para iluminar las urgencias, no han sido golpeados hoy por un apagón. Sí la urbanización de Bella Vista, donde un grupo de vecinos prendió fuego a unos neumáticos para protestar contra la gestión del gobernador, el chavista Omar Prieto. Mientras tanto, a orillas del lago, después de un día lavando recipientes de plástico en aguas contaminadas por menos de un dólar, Anileidy Vilches, de 32 años, se prepara para otra noche. “Toda la vida viví aquí, en la calle, desde carajita”, dijo horas antes.

 

 

—¿Corre algún riesgo?

 

 

—“No. De todas maneras, yo duermo con Dios”.

 

 

POLICÍAS, SOBORNOS Y GASOLINA: SIETE HORAS PARA LLENAR EL DEPÓSITO

 

 

Es mediodía en la bomba de los Quintero. La escena es una representación del caos, aunque parece regida por una organización misteriosa en la que cada actor desempeña un papel. Los empleados de la gasolinera, los clientes a la espera —cientos, quizá miles—, un grupo de enchufados, guardias y militares controlando el paso de vehículos. Después de unos minutos de pie, el pavimento empieza a deshacer la suela de goma de las zapatillas. A la vuelta de la esquina, la cola ocupa varias cuadros, más de un kilómetro. Javier Sarmiento, ingeniero civil de 37 años, come su almuerzo en un táper sentado en su camioneta pickup. “Llevo siete horas y así tengo que hacerlo dos veces a la semana, desde hace semanas. Ya estamos cansados”, se queja. Él está a punto de ser atendido y ha perdido toda la mañana. Otros consumirán la tarde a la espera.

 

 

“Antes esperabas una o dos horas”, explica Ángel Quintero, 38 años, empleado en la estación de servicio, una de las 20 gasolineras de Maracaibo que cuentan con generador eléctrico y pueden operar todo el día.

 

 

“La planta eléctrica era para emergencias, pero ya no. Ahora es para todos los días”, continúa. Se le acerca un teniente coronel del Ejército para susurrarle algo. “Diga, mi comandante… Usted me dice y yo cumplo”. “Tengo que hacerle caso por encima del dueño de la gasolinera”, comenta una vez se ha ido. Mientras la mayoría de los clientes aguardan horas bajo el sol, unos pocos conocidos logran colarse por un sobreprecio de cinco dólares. Todos participan de sus beneficios.

 

 

Este trabajador, que acaba de cobrar 32.000 bolívares soberanos por la quincena (seis dólares), acumula hasta 200.000 o 300.000 con estas mordidas. Después se reparte la maraña con los uniformados. “Este es el mundo al revés. Llegaron ellos y tenemos que compartirlo. Primero llegaron los policías, llegaron los guardias y tenemos que compartir con los guardias…”.

 

 

La escasez de gasolina en un país productor de crudo, en la ciudad del petróleo, es una de las mayores paradojas de Venezuela. ¿Qué ocurre? El sistema de producción dejó de ser sostenible debido a la desastrosa gestión de la petrolera estatal, PDVSA. Este es análisis de inmensa mayoría de los economistas. El seguimiento de la Asamblea Nacional, el Parlamento presidido por Juan Guaidó, indica que la capacidad de refinación está actualmente al 10%, es decir, 120.000 barriles diarios, cuando el consumo interno es de 200.000 barriles al día. A esas disfunciones se suman los apagones, que impiden bombear el combustible, y unos precios inverosímiles que no pueden sostener al sector. La gasolina es, de facto, gratuita. “No puede ser que una gandola (camión cisterna) de gasolina de 40.000 litros cueste 1,78 bolívares o 0,0002 dólares”, denunció la semana pasada el economista y diputado de Primero Justicia Ángel Alvarado. «Hay inventario de gasolina», tranquilizó el gobernador del Estado Zulia, Omar Prieto. “Ya llegó el buque para coordinar la distribución de la gasolina. Si no hubiese gasolina, estuviesen las estaciones de servicio no distribuyendo gasolina», dijo.

 

 

Sin embargo, a las afueras de Maracaibo, camino de la frontera con Colombia, se instaló un sistema de tráfico ilegal para todos los que puedan pagar en dólares o en pesos. Los llaman pimpineros,en referencia a las pimpinas o pequeños tanques de combustible, y se colocan a los dos lados de la carretera. ¿La policía no dice nada? “Sí lo hace, pero ahorita la vida está dura, qué vamos a hacer aquí. Los mismos policías vienen aquí a vender”, asegura uno de ellos.

 

 

Evencio González, de 67 años, controla uno de esos puestos junto a su antiguo restaurante, que tuvo que cerrar por falta de clientes. Explica que se encarga de mantener el orden en la zona y así evita las visitas de las fuerzas de seguridad. “Estamos comprando 25 litros a 20.000 soberanos. Nosotros los vendemos a 30.000”. Con una ganancia de menos de dos dólares por bidón, no deja de ser un negocio pujante, ya que González vende unos 200 litros al día. “Es el trabajo de ahorita”, asegura su nieto Orlando.

 

 

EL PAÍS

Fotografía: Andrea Hernández

Alnavío: En una negociación con la oposición el tiempo juega contra Maduro

Posted on: mayo 17th, 2019 by Super Confirmado No Comments

Otra negociación entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición venezolana. ¿Otra más? Algunos lo consideran así, una más. Sin embargo, han cambiado las circunstancias. Para Maduro y para la oposición, ahora encabezada por Juan Guaidó. ¿Qué es lo que la hace diferente?

 

 

El diario Alnavio aseguró en un extenso trabajo que no son sólo los noruegos. No es sólo esta intermediación, que se ha anotado éxitos y cuenta con unas credenciales que le brindan credibilidad global. De hecho, la iniciativa parte con el respaldo de múltiples factores, incluyendo los Estados Unidos y , por supuesto, La Habana. Los noruegos se han montado en esta operación para que haya un acuerdo. Y han dado muestras suficientes de que tal empeño es en serio. Ya se conocerán los detalles. Otros detalles.

 

 

Varios expertos dijeron a ALnavío que el tiempo en esta ocasión juega en contra de Nicolás Maduro. Lo señalan para despejar de entrada la especie de que el gobierno hará lo mismo que otras veces: usar el diálogo con el fin de ganar tiempo. Se les pregunta y los expertos enumeran:

 

 

-Hay prisa militar. Y esto significa que en la Fuerza Armada la presión porque se solucione el conflicto es alta. De hecho, así lo demuestra lo que ocurrió el 30 de abril. Entre los militares hay necesidad de que se arribe a un acuerdo. Pactado, eso sí. Los militares no quieren dar el golpe de Estado. El 30 de abril confirmó que los militares son los árbitros definitivos de la situación. El diputado a la Asamblea Nacional, Ángel Medina, por ejemplo, es de la tesis de que los militares son los únicos que ganaron en esa fecha.

 

 

“Perdió la política y ganaron los militares”. Si la situación se deteriora, ¿qué harán los militares? Maduro no es ajeno a esta probabilidad. Tampoco el poder cubano. La negociación implicaría el rescate de la política.

 

 

–Hay prisa social. Al régimen se le acaba el dinero para el clientelismo. Hay una cuenta clara. Se importa un promedio de 10 millones de cajas Clap a un precio de 32 dólares. Los productos alimenticios que componen las cajas de este programa social, representan mucho más, 8 veces más, de lo que gana un empleado público en Venezuela. Hay un cálculo hecho por empresarios: el salario mínimo y el bono compensatorio suman 55.000 bolívares, y los productos de la caja Clap, 600.000 bolívares, al menos así lo fue en marzo. La gente que recibe la ayuda observa la diferencia. ¿Esa gente se va a levantar contra Maduro? No. No por ahora. Hasta que se acabe el dinero y no haya más cajas Clap, ni con la periodicidad ni con la cantidad de productos.

 

 

Otra señal. Petróleos de Venezuela, PDVSA: el petróleo y la gasolina. La producción sigue bajando, y la gasolina escaseando. Hay gasolina porque empresas como Repsol están cobrando deudas, y a cambio de suministrarle nafta a PDVSA reciben petróleo crudo con un diferencial de precio. Pero este suministro es coyuntural, de semanas. ¿Qué pasará cuando no haya gasolina y las cajas Clap? Se dirá que en lo peor de los apagones más el corte de los servicios de agua y telefonía no ocurrió nada, la gente no se levantó. Pero ese mismo escenario no se va a repetir. El pueblo aguantó y sigue aguantando los cortes de electricidad. Cortar la asistencia de las cajas Clap es otro tipo de detonante.

 

 

De hecho, en las recientes jornadas de diálogo y reflexión organizadas por el PSUV, el partido de gobierno, los reclamos más sentidos fueron por los Claps y el combate contra la corrupción. El exministro Elías Jaua escribía en el diario Aporrea hace una semana: “Manifiestan con preocupación que al Presidente se le informe que los CLAPS, lleguen cada 15 días, cuando hay lugares que este año no han llegado; proponen que se hable con la verdad”. Los expertos vinculan la corrupción no sólo al acto de robar sino también a la ineficiencia y el burocratismo. En los Claps hay un punto clave.

 

 

-Hay prisa económica. Es la que de manera directa tiene que ver con el desastre. Las empresas públicas destruidas. La falta de producción. La caída del PIB. La hiperinflación. Empleo. Salario. Sin que nada de lo que concierne a la crisis económica esté en el marco de las soluciones urgentes. No en la política de Maduro. Aquí el chavismo fracasó. Aquí Maduro no ofrece soluciones.

 

 

Con las sanciones, la crisis va a empeorar. Un dato: en 2018, el 12% de la población contaba con algún poder de compra. Este índice ya se redujo a 8%. El dato surge de un estudio coordinado por varias empresas de la industria y el comercio. Ese universo de consumidores antes podía comprar prendas de vestir y artefactos eléctricos. Hoy se prioriza en más comida. Y los que quedan con poder de compra, es porque poseen dólares o cuentan con remesas en divisas que les envían desde el exterior. La crisis también ha colocado a los bancos al borde del precipicio, tanto a los públicos como a los privados. Hay otro dato. Una cervecera que requería hace 3 años 190 millones de tapas al mes, en abril solicitó apenas 3 millones de tapas de su proveedor. Estas cifras pueden arrojar pista de lo que sufre la cadena industrial, y el consumo, por supuesto.

 

 

 

Una urgencia distinta para Maduro

 

 

Estos tres aspectos le plantean al régimen de Maduro una urgencia distinta para negociar. Y no son las únicas. Porque a ello habría que agregar la opción Guaidó. Si bien Juan Guaidó no salió en la mejor posición de los hechos del 30 de abril, aún conserva prestigio, voz, fuerza, apoyo popular, y el respaldo de la comunidad internacional. Los expertos castigan a Guaidó a la hora de calificarlo. Supongamos que antes del 30 de abril le otorgaban 80 puntos, hoy lo rebajan hasta 70 y 65 puntos. Pero Guaidó representa la unidad opositora y no porque así lo haya decretado la dirigencia -siempre recelosa de sí misma- sino por decisión del pueblo.

 

 

De modo que Maduro tiene enfrente un interlocutor con suficientes armas. Y una de esas armas se llama los Estados Unidos y todo lo que ello implica contra Maduro y sus aliados: sanciones, presión diplomática, cerco económico y financiero, presión contra Cuba, Irán, negociaciones con Rusia, amenaza de intervención militar, etc. Los expertos señalan que si Guaidó logra convencer a todo el universo opositor de esta negociación, no ocurrirá lo del pasado cuando se fue a negociar no queriéndolo hacer. Y ello no significa que baje la presión de calle o se levanten las sanciones, por ejemplo. Por el contrario, esas son cartas para poner en la mesa de negociaciones, más aún cuando el impacto grueso está por llegar.

 

 

 

El Carabobeño

« Anterior | Siguiente »