¿Hace falta un anillo para eso? ¡No!
Estar en pareja es hermoso, pero no siempre resulta bien y no a todos les ocurre lo de “y vivieron felices para siempre”. Conozco algunas personas que no pueden vivir con otras y desean estar solas. La explicación que encontré a este tipo de conducta es queterminaron por casarse con ellas mismas.
Si piensas que tú eres una de esas personas pero no estás segura, lee lo que sigue y compara.
#1 No estás atada a ningún recuerdo
Esto es así porque solo tienes pensamientos sobre ti misma y ¡nada de que arrepentirte! Los recuerdos de parejas anteriores simplemente se van diluyendo en tu memoria.
#2 No tienes problema en emprender un viaje sola
Sabes como llevarte bien contigo misma y una buena forma de demostrarlo es irte de viaje sola.
#3 Disfrutas de las noches con tu propia compañía
Para ti no hay nada más grato que estar en compañía de tu control remoto viendo una buena película en la comodidad de tu cama o sofá… ¡Salir con un chico ni se te pasa por la cabeza!
#4 Eres auto suficiente
Tienes tu trabajo y por eso no necesitas que nadie te mantenga. Si necesitas algo, no tienes que pedirle nada a nadie, ¡tú misma puedes comprarlo y darte todos los gustos que quieras! Si eso no es estar casada contigo misma, entonces no sé que es.
#5 Tu autoestima está muy elevada
Piensas que no hay nadie mejor que tú y ¡tienes razón! No necesitas de un marido que te adule ni que te diga lo maravillosa que eres, eso ya lo sabes.
#6 No sientes “envidia” por ver a otras personas en pareja
Esto es más que obvio, pues como estás casada contigo misma, no te hace falta tener una pareja. Lo que quiero decir es que si bien antes te podías sentir afectada porque veías parejas tomadas de la mano y añorabas lo mismo para ti, ¡ahora ya no lo necesitas!
#7 Tienes el deseo de hacer algo y no consultas a terceros
El hecho de estar casada contigo misma significa que no necesitas pedirle permiso a nadie para hacer lo que se te ocurra.
Estas son algunas de las señales que indican que estás casada contigo misma y que estás muy bien así. Pero eso no quita que estés dispuesta a abrirte al amor algún día siempre y cuando se trate del hombre indicado, sobre todo si vienes de alguna decepción amorosa.
No tengas miedo de admitirlo, conozco muchas mujeres que aprendieron a convivir con ellas mismas y son muy felices e independientes, así que no te sientas culpable, ¡nunca!
iMujer
