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Según información de la última reunión del banco central estadounidense, casi todos los participantes consideran apropiado aumentar los tipos de interés en lo que queda del año, en especial debido a la alta inflación que obliga a mantener una política monetaria más restrictiva.
Durante este miércoles 5 de julio se conoció la última acta de la reunión de la Reserva Federal (Fed) de los Estados Unidos (EEUU), donde se tomó la decisión de mantener la tasa de interés entre un 5% y 5,25%.
Durante el encuentro de los días 13 y 14 de junio, “casi todos los participantes apuntaron en sus proyecciones económicas que consideraban que sería apropiado aumentar el tipo de interés oficial durante 2023″, según se leyó en la minuta.
Esta decisión viene dada por la necesidad, según los miembros de la Fed, de mantener una política monetaria restrictiva en vista de la inflación que continúa elevada pese a registrar caídas cada vez más pronunciadas, y frente a la robustez del mercado laboral.
Fed celebra el aumento del techo de deuda
Además, varios participantes celebraron el acuerdo por el techo de deuda de principios de junio entre la Casa Blanca y los republicanos de la Cámara de representantes.
Con esto, se eleva el límite al dinero que el Gobierno puede pedir prestado a cambio de topes al gasto público.
Previamente, tanto el presidente estadounidense, Joe Biden, como la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, criticaron el hecho que se dilatara la discusión sobre el aumento del tope de deuda, dejando la posibilidad de que el país entrara en incumplimiento de sus pagos.
El pacto logró evitar un impago de la deuda pública y “eliminó una fuente significativa de incertidumbre para las perspectivas económicas”, según la Fed.
Por último, los miembros del banco central estadounidense reconocieron que la incertidumbre bancaria provocada por el colapso de Silicon Valley Bank (SVB) en marzo, se ha alejado, aunque remarcaron la importancia de evaluar los efectos del sector bancario en las condiciones del crédito.
Una pausa en pos de combatir la inflación
En su última reunión, llevada a cabo durante los días 13 y 14 de junio, la Fed decidió pausar sus subidas de tipos de interés para luchar contra la inflación, manteniendo el tipo oficial en una horquilla de entre el 5 % y el 5,25 %.
Sin embargo, y a pesar de que registró una bajada de nueve décimas en mayo hasta situarse en el 4 %, la inflación continúa lejos del objetivo del 2 % del banco central, por lo que ya entonces adelantaron su intención de continuar con las subidas de tipos al menos en 2023.
Con todo, los miembros de la Fed incidieron en la importancia de guiarse por los indicadores económicos para trazar el rumbo futuro de la política monetaria. El próximo de estos indicadores, la tasa de desempleo, se conocerá este viernes. EFE
