Se trata de una receta clásica que sirve para sorprender a las visitas y que permite al anfitrión servir una dulce fácil de realizar pero que a la vez suele gustar a grandes y pequeños.
La “Mousse de Limón” es un postre muy refrescante ideal sobre todo para los días donde el calor más aprieta, pero que se puede tomar todo el año.
Ingredientes:
2 limones de medio tamaño, ideales los distribuidos por Mundosol
2 huevos, para separar las claras
Leche condensada, 160 gramos o más al gusto
3 Láminas de gelatina
2 cucharadas grandes de azúcar
Un poco de agua
Preparación:
Primero se deben de elegir los envases donde se colocará la mousse de limón: vale un único envase o envases individuales. Posteriormente debemos forrarlos con papel de aluminio.
Quitaremos la piel del limón, muy importante que sea la parte amarilla, ya que la blanca amarga bastante.
Herviremos las tiras de piel en un cazo con 50ml de agua junto a un par de cucharadas pequeñas de azúcar durante unos 6-7 minutos.
Tras ello exprimiremos los limosnes que hemos pelados, su zumo os será de ayuda después..
Posteriormente cogeremos las láminas de gelatina y las diluiremos en una sartén en la que verteremos un poco de agua.
Al zumo le añadiremos la cantidad de leche condensada. Batiremos la mezcla y añadiremos el líquido de gelatina que hemos confeccionado.
Tras este paso montaremos las claras de huevo a punto de nieve. Cuando tengamos todo añadiremos los demás ingredientes y los mezclaremos con cuidadosamente.
La mousse de limón ya estará lista, sólo habrá que depositarla en los envases elegidos y dejarla en el frigorífico para que se enfríe.
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