El yoga no consiste sólo en hacer ejercicio y estiramientos. La práctica de este deporte también permite crecer como persona. Un nuevo estudio del Journal of Holistic Nursing afirma que haciendo yoga uno puede lograr una versión más agradable y paciente de sí mismo, ya que un buen yogui aprende a ejercitar la mente.

En el estudio, los investigadores encuestaron a más de 1.000 practicantes de yoga en Estados Unidos. Un 87% indicó que el yoga aumentaba su felicidad y, el 67% informó de un impacto positivo en sus relaciones personales. Esta última cifra en particular, despertó el interés de los científicos, quiénes pidieron a los participantes que profundizaran en las formas en que las sesiones de yoga afectaron sus vidas fuera del gimnasio. Los temas más recurrentes fueron:

Conduce a la transformación personal

Respuestas:

• “El yoga me hace ser menos irritable”.
• “Con el yoga he aprendido a vivir más el momento, estoy más presente con los míos”.
• “El yoga me ha ayudado a ser consciente de mí misma y, como consecuencia, a ser más compasiva y comprensiva. He aprendido a conectar con los otros y a construir relaciones fuertes, honestas y de plena confianza.”

Las personas que practicaban yoga con regularidad certificaron que este deporte había ensalzado muchos aspectos positivos de sus vidas y restado importancia a los pequeños problemas. Estos beneficios se extendieron a sus relaciones personales. En concreto, afirmaron notarse más perspicaces, conscientes de ellos mismos, tranquilos, pacíficos, felices, amables, respetuosos, y compasivos. Y menos críticos e intolerantes frente los demás.

Aumenta la interacción social

Respuestas:

• “Me encanta mi grupo de yoga. Somos una red social de amigos que nos cuidamos entre nosotros.”

• “Mi marido y yo hacemos yoga juntos. Es la única práctica que mi marido y yo siempre seremos capaces de hacer juntos, no importa la edad que tengamos”.

Apuntarse a una clase de yoga es como empezar la universidad de nuevo: ganas crear un grupo de amigos con ideas afines. En las clases los profesores utilizan continuamente la palabra «comunidad» cuando se refieren al grupo de yoga y hacen hincapié en el estrecho vínculo que sienten los miembros del grupo. Se convierte pues en una terapia que ayuda a disminuir el sentimiento de aislamiento y de un estado psicológico negativo. El yoga ayuda a identificar los puntos positivos de cada uno y a fortalecer las relaciones con amigos, hermanos o pareja, ya que ofrece la posibilidad de practicar este deporte juntos.

Alivia y socorre en las dificultades

Respuestas:

• “El yoga ha salvado mi vida y mi matrimonio.”
• “He tenido que lidiar con un marido maltratador y con un posterior divorcio…Mi vida hubiese sido peor sin el yoga.”
• “Perdí mi trabajo en enero. Si no hubiese tenido el yoga y la meditación, me hubiese vuelto loco”.

Cuando la vida te pone al límite, el yoga puede ayudar a superar esos momentos. En las clases, los yoguis sienten que tienen tiempo para reflexionar y lidiar con los problemas difíciles y éstos se vuelven más fáciles de resolver. El yoga puede incluso ayudar a luchar contra las pérdidas importantes de nuestra vida producidas por la muerte y los divorcios.

Fuente: Women’sHealth