La ciudad colapsó el miércoles, otra vez. La protesta realizada por más de 300 motorizados, que salieron de la redoma de Petare y se dirigieron a la sede del Indepabis, para exigir la regulación de los precios de las motocicletas, generó caos y focos de violencia.
Durante la manifestación se registraron situaciones irregulares y, pese a las múltiples versiones que vecinos y testigos han dado a conocer a la opinión pública, ni Polichacao ni Policaracas tienen denuncia formal de los hechos.
La manifestación continúa en la agenda de la opinión pública. Los cuerpos policiales no tienen claro si la agresión que motorizados le hicieron a la conductora de un vehículo Ford que se desplazaba por la avenida Libertador con su hija, tiene relación con los arrollamientos de dos motorizados que se registraron en el municipio Chacao.
La situación generó incomodidad en la ciudadanía. Sin embargo, el sociólogo Luis Pedro España considera que la sociedad no debe estigmatizar a los motorizados: “Para los caraqueños los motorizados son la expresión más visible de la convivencia en los espacios públicos, pero ellos no son la causa del problema, son el síntoma de una ciudad carente de planes de convivencia ciudadana”.
Para el especialista, la impunidad y la falta de la intervención del Estado en esas situaciones dan origen a focos de violencia. “Esa manifestación es una muestra de la ausencia de Gobierno en el país, pues no hacen cumplir las normas de convivencia entre los ciudadanos. Es un estado de impunidad absoluta. Hay un inmenso error cuando reforzamos el pensamiento común y culpamos a los motorizados, estudiantes u otros grupos del caos que se vive en el país”, dijo.
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