El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró el 22 de julio con una bajada del 0,4 %, en 79,78 dólares el barril, en medio de preocupación por las perspectivas de demanda tras varios datos flojos de China.
Al término de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en agosto restaron 0,35 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior.
Según los analistas, el mercado hizo caso omiso de la situación política en Estados Unidos, donde el domingo el presidente Joe Biden renunció a la carrera por la reelección y señaló a su vicepresidenta, Kamala Harris, para la candidatura demócrata a la Casa Blanca.
Los inversores se enfocaron en China, cuyos datos ya estuvieron detrás de la pérdida de valor del Texas la semana pasada, y donde este lunes el banco central anunció por sorpresa una medida de política monetaria para apoyar la economía.
El Banco Popular de China anunció una rebaja de diez puntos básicos, del 1,8 % al 1,7 %, a las tasas que aplica a una de sus principales herramientas de inyección de liquidez, los acuerdos de recompra inversa (‘repos’) a 7 días, que ya estaban en mínimos históricos.
«El recorte de tipos de China ha sido demasiado pequeño para mejorar la confianza general en el petróleo crudo», dijo en una nota el analista Giovanni Staunovo, de UBS.
En otros mercados, los contratos de gas natural para entrega en agosto subieron a 2,25 dólares por mil pies cúbicos, y los contratos de gasolina con vencimiento el mismo periodo subieron a 2,47 dólares el galón.
Precio del petróleo Brent
El barril de petróleo Brent para entrega en septiembre cerró en el mercado de futuros de Londres con un descenso del 0,28 %, hasta los 82,40 dólares.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, cedió 0,23 dólares con respecto a la última negociación en el Intercontinental Exchange (ICE), cuando terminó en 82,63 dólares.
Los inversores sopesan los efectos de la retirada de Biden así como el posible nombramiento de Kamala Harris para sustituirle.
El mercado está pendiente también de la evolución de los inventarios de petróleo en EE.UU. y otras potencias consumidoras, entre temores por un descenso de la demanda.
Globovision
