Desde este sábado, los usuarios del transporte público de Guanare enfrentan la paralización del servicio con la amenaza de que dicha medidas sea extendida de forma indefinida por parte de los trabajadores del volante.
Unas 50 rutas servidas por busetas y carritos están paradas a la espera de que la cámara municipal de Guanare acuerde con la Federación de Transporte la nueva tarifa urbana, que en modo alguno podrá ser inferior a 35 bolívares, informa el chofer Juan Andrade.
Actualmente, los usuarios cancelan 20 bolívares por su desplazamiento en rutas servidas por busetas y 30 en rutas servidas por carritos o por puesto. De concretarse la exigencia de los transportistas, los pasajes quedarían en 40 y 60 bolívares, respectivamente.
Los trabajadores del volante alegan que las tarifas actuales, sostenidas antes del aumento de la gasolina, no compensan los costos de combustible ni la carestía de repuestos y autopartes.
Nosotros venimos luchando, dijo Andrade, desde hace casi dos meses para que se actualice el valor del pasaje, pero nuestras protestas y llamados de atención no han sido oídos.” Esperemos que este paro indefinido sirva para algo”.
El alcalde Rafael Calles manifiesta, por su parte, que la medida de paro se enfrenta con las rutas de Bus Portuguesa, “que alivian en gran medida el calvario que vive el pueblo con esta protesta.”
Los que padecemos este problema somos los usuarios, victimas de los taxistas inescrupulosos que valiéndose de la necesidad nos cobran hasta 700 bolívares por una carrera corta, indica Ramón Araujo, albañil del barrio Cuatricentenario
El Pitazo
