El gobierno del Reino de los Países Bajos señaló que en estos momentos “no hay motivo de preocupación ante una posible agresión de Venezuela hacia las islas ABC (Aruba, Bonaire y Curazao)”, y enfatizó que “no hay indicios de un nivel elevado de amenaza para ninguna de las regiones caribeñas del Reino”.
Los ministros neerlandeses de Defensa, Ruben Brekelmans, y Asuntos Exteriores, Caspar Veldkamp, ofrecieron esta declaración en respuesta a preguntas planteadas por los diputados del partido D66 -de tendencia socioliberal y progresista-, quienes se hicieron eco de las inquietudes expuestas en una carta por el gobernador de Bonaire, John Soliano.
En una misiva enviada el 25 de marzo a Brekelmans y Veldkamp, Soliano manifestó su preocupación por las “posibles consecuencias” del deterioro de la situación política y social en Venezuela, alertando sobre una eventual “afluencia incontrolable de refugiados a Bonaire”, así como de una “amenaza militar”.
Los altos funcionarios neerlandeses precisaron que no se han detectado actividades militares venezolanas recientes cerca de Bonaire, y apuntaron que los servicios de inteligencia de La Haya monitorean continuamente los acontecimientos políticos y militares en Venezuela, incluyendo cualquier posible implicación para Aruba, Bonaire y Curazao.
Visión crítica
Brekelmans y Veldkamp indicaron que el nivel de preparación del Ejército venezolano es bajo, a pesar de las recientes inversiones y el apoyo de aliados internacionales como Rusia, Irán y China, según reseñó el portal Curacao Chronicle.
El Servicio de Inteligencia y Seguridad Militar (MIVD) de Países Bajos considera que la Fuerza Armada venezolana enfrenta graves desafíos con una importante escasez de personal, una capacidad de entrenamiento limitada y equipos en mal estado, lo que se traduciría en una baja preparación operativa general.
Aunque reconocen que el entorno de seguridad global ha empeorado, el gobierno de Países Bajos estima que no se requieren medidas militares adicionales para Bonaire o las demás islas del Caribe Neerlandés.
Las Fuerzas de Defensa neerlandesas continúan realizando operaciones rutinarias en toda la región, con más de mil militares y civiles estacionados en la parte caribeña del Reino.