Ellas son conocidas como la Alma Mater. Son nuestras universidades: Públicas, independientes, autónomas, libres. Hechas para el debate y la ilustración. Donde las ideas se contraponen unas a otras buscando siempre la verdad. Lugar mágico dondese forma una parte importante de los grandes pensadores: ingenieros, juristas, políticos, científicos, tanto en Venezuela y como en el resto del mundo.
Son grandes familias cuyos mejores hijos nunca la olvidan y suelen recompensarlas generosamente. Sus mejores hijos. Michael Bloomberg el alcalde de Nueva York es un hombre agradecido con su Alma Mater. La lleva en el corazón. Mike, como se le conoce, fue un reputado dirigente del Partido Demócrata. Fue amigo de Kennedy. Rompió con ellos en el año 2001 dada las diferencias sostenidas en materia económica con los principales miembros del gabinete de Clinton.
En ese año se inició el gobierno de Bush(ito) y Mike se incorporó con maletas y pertrechos al Partido Republicano. Dentro de sus filas resultó electo alcalde de Nueva York en dos oportunidades. Una vez más como independiente dado que en el año 2007 se peleó igualmente con los Bush y arrancó su vida política como independiente.
Vale la pena destacar que Nueva York tiene un presupuesto superior a los 50.000 millones de dólares y tiene unos 250.000 trabajadores. Una verdadera nación. El señor Bloomberg, un exitoso hombre de negocios, ha donado a lo largo de su vida, a la Universidad Johns Hopkins, unos 1.000 millones de dólares. Una verdadera fortuna, digamos que al cambio callejero del dólar significa 23 años del presupuesto total de la UCV para el año 2013.
Así son los hijos agradecidos. Igual que el viejo William Reddington Hewlett quien ha cedido a Stanford, su Alma Mater, unos 400 millones de dólares. Numerosos nombres aparecen en esos listados de grandes contribuyentes. Rockefeller. Bill Gates. Steve Jobs. Es una relación del hijo agradecido a la Madre Nutricia del saber. Del conocimiento. Del amor a las ciencias y las artes. Una enseñanza universal copiada ligeramente en Europa, por los Tigres Asiáticos y en menor grado por Brasil, India y Suráfrica.
En Venezuela las cosas resultaron contrarias. Pérfidas. Infames. Algunos de sus hijos avenidos en Alcaldes o en Vicepresidentes o en ministros de Educación Superior han resultados verdaderos matricidas. Llenos de odio en la sangre. Con pus en el alma. Cargados de maldiciones, de maldades y de venganza. Inexplicablemente sumisos ante quienes hace tan solo un instante eran los gendarmes de las botas militares.
Aparecen pidiendo a gritos la eliminación de la autonomía. Violando sus recintos. Amparando criminales que se pasean armados y orondos por sus jardines y caminerías. Que queman rectorados, decanatos, centros de estudiantes. Son la expresión de un factor putrefacto de la sociedad. El estiércol maloliente de un sistema encaramado en las escaleras del robo, de la corrupción. Que siembran la división y el enfrentamiento. Ni uno solo de esos boliburgueses que hoy hacen compras millonarias de medios de comunicación ha donado medio a su Alma Mater.
Son parias de la vida que terminarán en cementerios olvidados, donde cada cierto tiempo algún profesor emérito, sabio y memorioso se detendrá para arrojar sobre sus tumbas una buena escupida, un merecido salivazo. La enseñanza de Bloomberg va entonces en varios episodios o en varios niveles. Su compromiso con la ciudad de Nueva York donde conserva niveles de aceptación gigantescos después de años y años de gobierno.
No importa si eres millonario o no, el ejercicio de la política es la entrega, el amor, el respeto por una ciudad y sus habitantes. Es trabajar afanosamente en su bienestar, en su seguridad, en sus servicios. Bloomberg ha sido el mejor conserje en la historia de Nueva York, un “janitor” con una pequeña cuenta de 25 mil millones de dólares que, según sus propias palabras, habrá donado antes de irse de este mundo.
Sigue su legado por el amor y respeto a su Alma Mater. Que distinto de los bandidos alcaldes y ministros que siendo egresados de la UCV solo la citan para ofenderla. Y finalmente su decisión de romper con estructuras partidistas, demócratas o republicanas, cuando su conciencia así se lo dictaminó. Los jefes criollos del gobierno actual, no romperán jamás con el PSUV pues es su fuente inagotable de enriquecimiento ilícito, de corrupción, de los vicios y enfermedades de la democracia. Serán recordados, pero como malos ejemplos. Matricidas y ladrones. Y sus hijos heredaran el pesado y despreciable fardo de su historia.
@ssemtei
Por Eduardo Semtei