Ante la crisis, Grecia lo hizo ¿En Venezuela lo harán?
julio 6, 2015 7:46 am

Como en Grecia ¿Tendrá el gobierno venezolano las bolas para convocar un Referéndum ante la crisis?

 
La citada expresión no tiene la intención de causar algún tipo de irrespeto al lenguaje, más bien es un frase muy utilizada por el ciudadano común a la hora de retar o pedir una prueba de valor.

 

 

El principio de nuestro Proyecto Revolucionario y Bolivariano, es el sentido constituyente y refrendario, plasmado de manera taxativa en la constitución del año 1999, es la expresión plena de las claves que mueven al pueblo en pro de tomar las mejores decisiones, o por defecto las más democráticas, elevando siempre la premisa «La Voz del Pueblo, es la de Dios».

 

 

La participación y el protagonismo, son dos de las características de la democracia revolucionaria, de hecho son consecuencia de más de 500 años de lucha de los pueblos, en contraposición a las cúpulas privilegiadas, burguesas y capitalistas, entes visibles castradores y esclavizadores, en aras de la acumulación desmedida.

 

 

En Grecia cuna da las primeras ideas y doctrinas filosóficas, la democracia ha vuelto a su esencia, al espíritu que anima el despertar por un futuro mejor; hace propicia la convocatoria de ese mismo pueblo sufrido, a elegir el rumbo orientado por el Eurogrupo, es decir si continua pasando penurias, hambre y atropellos, impuestos por las condiciones económicas de las instituciones hegemónicas agrupadas en la Troika.

 

 

Su decisión guiará no solo el futuro del país helénico, sino el destino del pueblo europeo. Observando lo anterior y tomando en cuenta los instrumentos escritos en la Constitución Bolivariana, nos preguntamos ¿Por qué el presidente y su tren ejecutivo aún no han tomado la decisión de convocar un referéndum consultivo, que oriente el rumbo económico del país?

 

 

Ese referéndum tan necesario para el pueblo venezolano, debería estar encauzado a la consulta sobre temas tan importantes como la organización y puesta en marcha de auditorías públicas en todas las instituciones del Estado, en especial las que hicieron y hacen uso discrecional de nuestras divisas alimentando el defalco más grande de la historia, como también a los organismos y empresas públicas y privadas inmersas en manejos oscuros de los recursos financieros que son de todos los ciudadanos.

 

 

La consulta a nuestro pueblo, hoy se hace más necesaria que nunca, la corrupción y la injusticia deben ser combatidas con más democracia y participación de la gente, quien al final es el que sufre y padece la crisis económica, social y política que atraviesa la nación.

 

 

Mensaje final: Chávez nunca tuvo miedo, porque mandaba con el pueblo.

 

Luis Lira Aponte