logo azul

Nuevos dispositivos bioeléctricos que funcionan con solo llevarlos puestos

Categorías

Opinión

Nuevos dispositivos bioeléctricos que funcionan con solo llevarlos puestos

Un dispositivo que se alimenta de nuestro movimiento y crea electricidad parece cosa de ciencia ficción, pero la universidad de California lo ha conseguido y podría usarse para dar energía a pequeñas máquinas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Uno de los grandes problemas que trae la tecnología es la energía que requiere para funcionar. Se ha intentado solucionar y se han ido mejorando las baterías, pero ahora se ha dado un paso más allá.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


En la Escuela de Ingeniería UCLA Samueli, en su departamento de bioingeniería, han inventado un material suave y flexible que puede generar energía. Este material tiene la capacidad de transformar el movimiento en electricidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Todo se debe al efecto magnetoelástico, que mide la energía que se produce cuando pequeños imanes se juntan y separan de manera constante. Este efecto se consigue con máquinas que repiten movimientos, pero también puede hacerse con este polímero utilizado.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


En este nuevo material se han colocado imanes microscópicos que han generado energía con el efecto magnetoelástico. Esta idea se ha presentado y posteriormente demostrado en la revista Nature, donde también se ha explicado las consecuencias prácticas del descubrimiento.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Según Jun Chen, líder del estudio y asistente del catedrático de bioingeniería de la UCLA Samueli, «permite a las personas estirarse y moverse con comodidad cuando el dispositivo se presiona contra la piel humana, y debido a que se basa en el magnetismo en lugar de la electricidad, la humedad y nuestro propio sudor no comprometen su eficacia.»

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 



Para demostrarlo crearon una lámina con nanoimanes de neodimio-hierro-boro, que pusieron con una banda de silicona en el codo de una persona. Tras unas cuantas pruebas, se comprobó que se generó 10.000 veces más energía que con otra tecnologías comparables.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Es tan sensitivo y potente que el latido de un ser humano podría ser suficiente para crear electricidad. Tendría capacidad para alimentar aparatos de medición del pulso, así como termómetros y otros dispositivos similares.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Sus aptitudes para doblarse y que no tengan ningún problema con la unión a la piel humana, lo hacen ideal para investigar en el futuro.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Sin problemas con la humedad o con los movimientos de nuestro cuerpo, se trata de una invención muy útil. Actualmente se está investigando su capacidad para que sirva como fuente de alimentación en wearables como relojes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: Computerhoy
Por: Maria Laura Espinoza
Twitter: @i_am_LauEz14

Comparte esta noticia:

Contáctanos

Envíe sus comentarios, informaciones, preguntas, dudas y síguenos en nuestras redes sociales

Publicidad

Si desea obtener información acerca de
cómo publicar con nosotros puedes Escríbirnos

Nuestro Boletín de noticias

Suscríbase a nuestro boletín y le enviaremos por correo electrónico las últimas publicaciones.