No permitan que su teléfono inteligente los convierta en una pareja tonta. Estas 7 tácticas para activar las alarmas evitarán que tu relación se desmorone.
Lo llevas a todas partes
Las parejas que conversan cuando llevan consigo sus celulares, aun si no los están usando, reportan tener una empatía menor de su compañero y experimentar una relación menos satisfactoria, de acuerdo con un estudio británico de 2012. Las parejas también dijeron que los teléfonos disminuyeron cercanía y confianza. Prueben esto: dejen sus equipos en la habitación contigua, contesten únicamente las llamadas telefónicas. Con el tiempo, las conversaciones serán más profundas y frecuentes. ‘Si luchas contra la compulsión, saca el teléfono de tu vista’, dice Katherine Hertlein, investigadora de sexualidad y tecnología. Obvio, ¿verdad? Pero, ¿lo haces?
Escribes demasiados mensajes de texto
Revisa tus llamadas recientes para que veas hace cuánto que no le hablas y después cuenta los mensajes de texto que le has enviado desde esa ocasión. Ahora, ¿en cuántos te equivocaste al escribir o ella al leer? ‘A causa de la naturaleza abreviada de los textos, las parejas a menudo malinterpretan lo que no se dicen, más que lo que sí se menciona’, señala Hertlein. Un texto corto puede parecer brusco, mientras que el retraso de otro podría activar algunas alarmas. Intenta esta solución: cuando se encuentren en locaciones diferentes, pero necesiten arreglar algo, no lo hagas a través de mensajes de texto. Mándale un correo electrónico. ‘Escribirlo hace que lo revises y no cometas errores, lo cual acaba con la confusión
Están muy conectados
Los tweets echan a perder el asombro. ‘Escribirle mensajes de amor está bien, pero la comunicación nunca será tan fuerte como cuando es frente a frente’, explica Hertlein. Esa tendencia de estar revisando al otro puede tener su origen en un impulso más profundo: ‘Algunas veces extrañamos a nuestra pareja y solo buscamos una conexión, sin que necesariamente nos estemos comunicando con ellos’, añade la doctora Jesse Fox, profesora de la Universidad Estatal de Ohio, quien estudia el apego romántico y las redes sociales. Deja de fingir sorpresa cada que tu pareja te cuenta algo que ya leíste previamente en tu timeline. Prueba esto: deja de seguir a tu pareja en las redes sociales, disfrutarás más sus historias.
Te resulta confortable
‘Las personas piensan que al revisar sus teléfonos pueden controlar una situación comprometida’, dice Hertlein. Lo que sucede en realidad es un intento por encontrar confortabilidad psicológica en un escenario que es físicamente difícil de controlar. Al guiarnos hacia adentro, evitamos lo de afuera.
Pierdes la noción del tiempo
Llámalo el salto en el tiempo del teléfono inteligente: lo que comienza como un vistazo rápido a Facebook, se convierte en lagunas de tiempo perdido. ¿Cómo es que llega a suceder esto? ‘Dado que las funciones del teléfono inteligente son más rápidas (un minuto en Twitter por aquí, un texto de 30 segundos por acá), el cerebro no registra el tiempo que se emplea en cada una de estas acciones’, explica Hertlein. Estos logros diminutos intensifican la necesidad de revisar tu equipo celular.
Conversación instantánea con ella
‘Cuando estén separados, las fotografías son mejores que los textos para compartir momentos espontáneos’, dice la doctora Jesse Fox, de la Universidad Estatal de Ohio. ‘Y demuestran que piensas en ella’. También puede funcionar el enviar videos cortos.
Haz un storyboard con tus viajes
‘Las parejas hablan de sus planes a futuro, pero omiten cosas’, señala Fox. Cuando decidas sobre tus próximas vacaciones, crea un documento de Google y llénalo con imágenes y ligas de lo que te gustaría hacer. ‘Agregará excitación y demostrará tu compromiso’.
Reduce las distancias
‘Las llamadas telefónicas comunican poco’, dice Fox. ‘Cuando ves su cara, puedes ver que es feliz y saludable, y eso hace que te sientas bien’, agrega. Así que, si estarán separados por un tiempo, agenda citas por Skype o FaceTime aun cuando solo sea para chatear o ver la televisión juntos.
Fuente: Men’sHealth