Roxana Valdés, una chilena de 39 años, tuvo un ataque de ira cuando descubrió que su novio le había robado 10.000 dólares. Después de asesinarlo, desmembró su cuerpo y lo hirvió durante varias horas
Valdés asesinó a Carlos Ramírez de un disparo. Fue durante una fuerte discusión en su hogar en Molina, ubicada a 200 km al sur de Santiago. La mujer insistía en que su novio la había estafado.
Para ocultar el crimen, descuartizó su cadáver y cocinó los pedazos en una olla durante varias horas. Luego, puso los restos en bolsas de basura. Según informó Soy Chile, la mujer no se atrevió a deshacerse de él y pasó todo el fin de semana con el cuerpo despedazado de Ramírez en la vivienda. Recién el domingo se entregó.
«La imputada reveló que trató de hacer desaparecer a su conviviente y, de cierta forma, habría logrado seccionar el cuerpo», dijo el fiscal que lleva el caso.
Según declaró la madre de la mujer, «existía violencia intrafamiliar en la pareja» y agregó que su hija arrastraba una profunda depresión por la pérdida de un bebé.
Fuente: ÚN