Los pequeños de Jennifer López, Max y Emme, todavía no están acostumbrados a la fama de su madre.
Al menos así quedó patente durante su encuentro con los medios en el estreno de la cinta animada de Dreamworks, Home, en Los Ángeles, al que acudieron acompañando a su famosa mamá.
Los mellizos de 7 años desfilaron junto a López delante de los fotógrafos y demostraron que a pesar de tener dos celebridades internacionales como padres, ellos todavía no llevan bien ser el centro de atención de los paparazzi.
Tanto es así que Max rompió a llorar. Aunque el disgusto no le duró mucho, ya que la cantante, al darse cuenta de que su pequeño no lo estaba pasando muy bien, se arrodilló para tranquilizarlo.
López pone la voz al personaje de Lucy en la cinta e interpreta uno de los temas centrales del largomentaje «Feel the Light».
Fuente: People en Español