El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, aseguró que «en Venezuela no hay otra salida que no sea el diálogo», en relación con la situación política y social de ese país.
«La única salida al tema de Venezuela es el diálogo por un problema casi obvio y es que el país está dividido en dos mitades. Todos reconocen que es así», declaró Insulza, según informa Efe.
«Si de repente una parte gana y la otra pierde, la división va a volver», agregó.
Por eso, a su juicio, la única posibilidad de acabar con el tema «es acercar a los ciudadanos de manera que entre todos haya una mayoría para resolver los problemas».
«Venezuela tiene problemas económicos muy graves y si (las partes) no se aproximan para buscar un acuerdo, se puede producir una crisis aún mayor», advirtió Insulza, quien lleva desde mayo de 2005 al frente del organismo multilateral que representa a todos los países del continente americano.
En opinión del secretario general de la OEA, la posibilidad de que la oposición se siente a la mesa está limitada si una parte de sus dirigentes siguen en la cárcel.
Además, «la prisión prolongada sin que haya cargos ni juicios no es conveniente», dijo.
«El señor (Leopoldo) López (en prisión desde febrero pasado) y otros deberían haber sido puestos en libertad bajo fianza o una cosa por el estilo», apuntó el secretario general de la OEA. «Yo no estoy llamando a nada, simplemente estoy verificando que en una oposición que tiene diferentes sectores es muy difícil que unos se sienten a la mesa mientras otros están presos», puntualizó.
Según Insulza, «la posibilidad de diálogo se va apagando por la falta de disposición de las partes a hacer concesiones». «Desgraciadamente, el diálogo no ha funcionado. Hubo un buen inicio, pero en el debate no hubo algo que es fundamental en un diálogo, hacer concesiones, aceptar», concluyó Insulza.
EL UNIVERSAL