Ante las circunstancias actuales que vive el país, toma cada vez más importancia en toda empresa la necesidad de efectuar una planificación financiera y fiscal.
Al analizar el presupuesto nacional ejecutado del 2016, los ingresos están representados en un 83% por ingresos fiscales producto de la recaudación de los impuestos pagados por las personas naturales y jurídicas.
Queremos insistir en el sentido que ahora más que nunca cobra importancia la planificación financiera y fiscal ya que debemos ser oportunos en la toma de las decisiones como líderes de nuestras empresas. En ese sentido se deben seguir acciones a los fines de poder determinar los impuestos a pagar así como la rentabilidad de su negocio en momentos de crisis.
A continuación enumeramos algunos pasos básicos para una planificación fiscal:
1) Determinar la utilidad o pérdida del periodo comprendido desde enero hasta octubre de 2017, antes de Impuesto sobre la Renta.
2) Elaborar un presupuesto financiero para los dos últimos meses (noviembre y diciembre de 2017), que implica una estimación de los ingresos, costo de producción y/o servicios.
3) Diseñar una planificación fiscal conjuntamente con su asesor tributario, que debe tener un conocimiento financiero, contable, jurídico y tributario, especialmente de la Ley de Impuesto sobre la Renta.
Banca y Negocios