Eric Holder, secretario de Justicia de Estados Unidos, presentó ayer el informe solicitado por el presidente, Barack Obama, que contempla nuevas y más estrictas condiciones para investigar las comunicaciones de los periodistas.
Según informó ayer Jay Carney, portavoz de la Casa Blanca, Obama recibió y aceptó esas nuevas normas, que limitan los supuestos para espiar y destapar las fuentes periodísticas que hayan incurrido en una violación de las leyes que protegen la seguridad nacional.
Los detalles de las revisión de esas normas fueron publicados ayer por el Departamento de Justicia, después de que en mayo se conociera que el gobierno estadounidense obtuvo los registros telefónicos de periodistas de la agencia Associated Press (AP) para conocer la fuente de una filtración.
Poco después de estas revelaciones se conoció un caso similar en el que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) espió el correo electrónico de un corresponsal en Washington de la televisión Fox News, James Rosen, por publicar información filtrada por una persona vinculada al Departamento de Estado.
Las nuevas normas presentadas por el Departamento de Justicia entrarán en vigor de manera inmediata y se espera que impidan que se trate a un periodista como cómplice en una filtración a fin de conseguir autorización para espiar sus comunicaciones con sus fuentes.
Fuente: La Verdad