Los líderes del G7, las siete democracias más industrializadas del mundo, denunciaron este viernes las «continuas violaciones» de los derechos humanos en Venezuela y abogaron por una «transición pacífica a la democracia» en ese país.
Los jefes de Estado o de Gobierno de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Italia, Japón y Reino Unido mantuvieron un encuentro por videoconferencia, el último de la presidencia rotatoria italiana, y entre otras cuestiones abordaron la situación en Venezuela.
El grupo «reiteró su condena por las continuas violaciones de los derechos humanos y renovó su compromiso para facilitar la transición pacífica hacia la democracia», según un comunicado.
La crisis en Venezuela ha sido tratada frecuentemente a lo largo de este año de presidencia de turno italiana y el pasado 26 de noviembre los ministros de Exteriores del grupo apoyaron el triunfo electoral del opositor Edmundo González Urrutia.
Acto seguido, el Gobierno de Venezuela de Nicolás Maduro anunció que revisaría sus relaciones con los países que integran el G7 debido a su respaldo al candidato opositor.
En el encuentro de hoy, por videoconferencia participaron los actuales jefes de Estado o de Gobierno de Alemania, Canadá, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y el saliente de Estados Unidos, Joe Biden, así como la presidenta de Comisión Europea, Ursula von Der Leyen.
Esta fue previsiblemente la última cumbre virtual convocada por la presidencia de turno italiana, representada por la primera ministra Giorgia Meloni, y ha servido para ceder el relevo al canadiense Justin Trudeu, que organizará este foro durante 2025. EFE