François Hollande reafirmó su determinación de combatir al grupo yihadista que reivindicó los atentados
Francia empezó ayer a sepultar a las víctimas de los atentados del 13 de noviembre, con procesiones e iniciativas originales que se prolongarán a lo largo de toda la semana. Las exequias se llevarán a cabo en 29 ciudades.
Los atentados, reivindicados por el Estado Islámico, dejaron 130 muertos y más de 300 heridos, varias decenas de ellos de suma gravedad. 90 personas fueron masacradas en la sala de conciertos Bataclán. La mayoría de las víctimas tenía entre 20 y 30 años de edad; 25 eran extranjeras o francesas con doble nacionalidad.
Por otra parte, aeronaves embarcadas en el portaaviones francés Charles de Gaulle realizaron ayer sus primeras misiones sobre zonas de Siria e Irak controladas por el Estado Islámico, informaron fuentes militares. Sin embargo, se abstuvieron de precisar si se trataba de misiones de observación o de bombardeos.
El presidente François Hollande reafirmó su determinación de combatir al grupo yihadista. “Vamos a intensificar nuestras incursiones aéreas, vamos a escoger los objetivos que ocasionen el mayor daño posible a esa organización terrorista”, declaró en una rueda de prensa en París, junto a David Cameron, primer ministro británico.
16 detenidos en Bélgica. La policía belga realizó el domingo en la noche varias redadas. Según la Fiscalía 16 personas fueron detenidas, pero no se localizaron armas, explosivos ni al prófugo Salah Abdeslam, el supuesto terrorista que huyó luego de ayudar a los suicidas que atentaron en París el 13 de noviembre.
El Nacional Web