¿Quieres ponerle sazón a esos momentos hot?, ¿se vale incluir comida en el sexo? ¡Claro que sí! La comida en la cama puede ser una gran manera de darle un giro radical a tus encuentros sexuales.
NO EN ZONAS OCULTAS
Aunque la idea de lamer o morder ciertas partes del cuerpo de tu pareja suena tentador, debes considerar que hay ciertas áreas que deben permanecer intactas (y secas) durante este experimento.
Ni el pene ni la vagina deben ser expuestos directamente a los alimentos. ¿Las razones? Podrías exponerlos a serias infecciones y
bacterias.
Así que mantén la comida en los alrededores y ¡que comience el juego!
EL PERFECTO JUEGO PREVIO
Se vale incluir la comida en los juegos preliminares. Sí, en esos momentos de coqueteo y pasión que te preparan para tener el sexo más apasionado de tu vida.
Así que si quieres calentar motores, la comida será el instrumento ideal para hacer que ambos se exciten por completo.
PLAN DE ATAQUE
Incluir alimentos en el sexo puede hacer que esa sesión candente se torne un tanto «messy», por lo que debes planificar desde la locación hasta la comida que vas a usar.
Usa ropa de cama que puedas ensuciar sin problema, acomoda todos los alimentos en contenedores para no mezclar sabores ni derramar nada que no quiera ser derramado.
También deja a la mano algunas toallas que los ayuden a limpiarse después de comerse (literal) mutuamente; ¡créenos!, no hay nada peor que salir corriendo por un poco de papel en ese momento hot.
LISTA DE ALIMENTOS Y MAPA DE POSICIÓN
¿Preparada para comerte a tu pareja? La comida que se vale en el sexo puede ir desde lo más dulce hasta lo más atrevido, la idea es que ambos disfruten y se exciten al máximo.
El chocolate untable puede ser tu aliado para saborear el torso de tu pareja, al igual que la crema batida y frutas como fresas, plátano y cerezas.
Si de temperatura hablamos, pasar un hielo por los brazos y el cuello, ¡seguro los hará vibrar! Tampoco olvides estimular el sentido del olfalto con aceites de aromas sensuales como vainilla, coco y frambuesa.
Las frutas pequeñas como las uvas, las pueden colocar en el ombligo y pecho para degustarlas con dulces besos y suaves mordidas.
Si sigues estos pasos, convertirás esta nueva forma de tener sexo ¡en toda una experiencia que los dos amarán!
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