En un reciente webcast de Chevron, el gigante petrolero con sede en California, su director ejecutivo Mike Wirth expresó una postura conservadora respecto a la expansión financiera en Venezuela. A pesar de ser la única corporación petrolera de Estados Unidos con permiso para operar en el territorio venezolano, Chevron ha decidido mantenerse al margen de nuevas inyecciones de capital.
“Se los recordaré. Ahora mismo no estamos invirtiendo capital en Venezuela”, enfatizó Wirth, en palabras recogidas por Hart Energy, un reconocido portal del sector energético.
Esta declaración resuena en un contexto de incertidumbre política y económica en Venezuela, que continúa enfrentando sanciones internacionales. Chevron, bajo la autorización de la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos (Ofac), opera en el país bajo condiciones específicas, como lo demuestra la Licencia General (GL) No. 41, que permitió a la empresa incrementar la producción en colaboración con Pdvsa.
No obstante, la prudencia domina la estrategia de Chevron, que prefiere reinvertir los beneficios obtenidos de sus operaciones actuales en lugar de comprometerse con nuevos proyectos de inversión. La compañía sigue evaluando la situación, manteniendo un enfoque cauteloso en sus decisiones financieras en Venezuela.
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