Chandler Parsons, que jugó nueve temporadas en la NBA, anunció este martes su retirada oficial del baloncesto profesional, a dos años de sufrir un grave accidente de transito.
«No sé ni por dónde empezar… Han sido dos años locos y han puesto muchas cosas en perspectiva», explicó en su cuenta de Instagram.
El 15 de enero de 2020, Parsons iba en automóvil en Atlanta (EE.UU.) tras un entrenamiento con los Hawks cuando se vio involucrado en un accidente provocado por un conductor en estado de embriaguez.
Esa colisión le dejó graves secuelas físicas que le impidieron seguir jugando al baloncesto, por lo que los Hawks rescindieron su contrato en febrero de 2020.
Parsons presentó una demanda contra aquel conductor y el portal The Ahtletic señaló hoy que el jugador ha llegado a un acuerdo para cerrar esa denuncia a cambio de «una sustancial cantidad de dinero».
En su mensaje de despedida, Parsons se mostró muy agradecido por sus años en la cancha y recordó que el sueño de su vida era convertirse en un jugador de la NBA.
«Solo quería competir y jugar al baloncesto al más alto nivel. Puedo decir orgullosamente: yo hice ESO!», señaló.
Parsons fue elegido en el puesto 38 del draft de 2011 por los Houston Rockets tras cuatro años en la Universidad de Florida.
Con los Rockets jugó tres temporadas y en la última de ellas logró los mejores números de su carrera: 16,6 puntos, 5,5 rebotes y 4 asistencias por partido.
En 2014 llegó al vestuario de los Dallas Mavericks y ahí jugó dos temporadas en las que mantuvo un nivel notable (en la temporada 2015-2016 promedió un 41,4 % en tiros de tres).
Dos años después firmó el gran contrato de su carrera: 96 millones de dólares por cuatro años con los Memphis Grizzlies.
Sin embargo, su rendimiento se vio muy afectado a partir de ahí por sus problemas en las rodillas y no estuvo a la altura de las expectativas creadas en Memphis.
Tras tres años con los Grizzlies, Parsons se incorporó en 2019 a la plantilla de los Atlanta Hawks, con quienes solo pudo jugar cinco partidos antes de sufrir el accidente de coche.
Fuente: El Nacional