Apagones, calles y viviendas anegadas, árboles y vallas publicitarias derribadas, fue lo que dejaron las intensas lluvias que estuvieron acompañadas de granizo, vientos huracanados y descargas eléctricas registradas entre la noche del sábado y durante la mañana de este domingo en los estados Zulia y Mérida.
Las fuertes precipitaciones acompañadas de fuertes vientos dejaron a 40 familias damnificadas en estas dos regiones del territorio nacional.
Reportes de bomberos y de Protección Civil del Zulia, indican que al menos 30 familias quedaron damnificadas por el temporal, en su mayoría habitantes del municipio Jesús Enrique Lossada y del barrio San Isidro al oeste de la capital zuliana. En el primero, varios techos de casas cedieron por las ráfagas.
El Terminal de Pasajeros de Maracaibo se inundó por el aguacero que comenzó cerca de las 5 de la mañana de este domingo y que se prolongó por más de 3 horas, lo que demoró el ingreso y descarga de unidades de transporte.
Comisiones de Protección Civil evalúan zonas afectadas y el aumento del caudal en principales cañadas que atraviesan la ciudad marabina. También se reportan viviendas anegadas en Cabimas, Santa Rita y el municipio San Francisco.
El Servicio de Emergencias 171 informó que atendieron a familias de viviendas inundadas en seis parroquias de los municipios Maracaibo.
En Mérida, un total de 10 familias damnificadas y más de cien afectadas, fue el saldo de los vientos huracanados que azotaron al municipio Julio César Salas (Arapuey), este sábado en horas de la tarde.
Todo comenzó como a la 1:30 de la tarde cuando en la zona norte del estado comenzó a caer un fuerte aguacero, el cual, acompañado de vientos huracanados causó destrozos y dejó al menos diez familias damnificadas y más de 100 afectadas.
Protección Civil de Mérida, informó que los daños fueron considerables en estas viviendas, ya que el tornado arrasó con los techos de las mismas y causó otros daños materiales en comercios y obras públicas. Los habitantes de Arapuey narraron que los fuertes vientos comenzaron a alarmar a la población, porque se asemejaban a un tornado.
Fuente: EU