La directora Greta Gerwig y los protagonistas de su película Barbie, Margot Robbie y Ryan Gosling, fueron las grandes estrellas del almuerzo de los Oscar que reúne a todos los nominados un mes previo a la celebración de la entrega de los premios.
Pese a las polémicas que han existido en redes sociales sobre los supuestos desaires que la Academia de Hollywood tuvo al no nominar a Gerwig y a Robbie en las categorías de Mejor Dirección y Actriz respectivamente, ambas fueron bien recibidas por sus colegas en el encuentro en el que se toma la foto generacional de los nominados de cada edición.
Desde su llegada al salón principal del hotel Beverly Hilton de Beverly Hills (California, Estados Unidos), Gerwig no pudo dar un paso sin antes ser interceptada por algún miembro de la industria o invitado quienes se acercaban a felicitarla, hacerle un comentario por su trabajo o a pedirle una selfie.
«Estoy muy feliz, esto es muy emocionante y estoy disfrutando todo. Esto es algo que nunca envejece», dijo la directora de Barbie a EFE.
Lo mismo sucedió con Gosling, quien fue el responsable de tener una de las mesas más concurridas del almuerzo al atraer a personalidades como Carey Mulligan o Emily Blunt.
Sin embargo, el momento más emocionante fue su reencuentro con Emma Stone, su excompañera de elenco en la cinta La La Land que les valió a ambos una nominación al Oscar en las categorías de Actor y Actriz protagonista en 2017.
Por su parte Robbie, la barbie de ‘carne y hueso’, también fue una de las más cotizadas del evento y una de las mejores vestidas al portar un traje clásico de Chanel color rosa, muy acorde a los atuendos que llevó durante la promoción del filme sobre la muñeca de Mattel.
«Estar aquí es muy emocionante», comentó a EFE Robbie, quien adelantó que este lunes tendría la primera prueba de vestido para la ceremonia que se llevará a cabo el 10 de marzo.
Un perro estrella
Sin duda, otra gran astro del evento fue Snoop, el border collie de Anatomía de una caída, que se robó el corazón de la actriz America Ferrera, quien no desaprovechó la oportunidad de tomarse una foto o el propio Gosling quien se acercó al canino para conocerlo.
La presidenta de la Academia, Janet Yang, felicitó a los presentes por el «privilegio de orden superior» que es el ser nominados a los galardones y les recordó que tienen que preparar discursos de agradecimiento concretos.
«Por favor mantengan sus discursos cortos, tienen 45 segundos (…) Hablen con el corazón y sean auténticos», indicó la presidenta.
Yang utilizó como recurso un video del discurso que el español Javier Bardem dio en 2008 cuando ganó el Oscar por su trabajo en No Country for Old Men (No es país para viejos) para ejemplificar lo que es un buen discurso y para demostrar que los 45 segundos son más que suficientes.
Los aplausos no faltaron en ningún momento, pero una vez que comenzaron a llamar a los actores a las gradas para la foto generacional, algunas personalidades recibieron más ánimos que otros, como lo fue el caso de Lily Gladstone, el cantante Jon Batiste, el veterano director Steven Spielberg o el actor Paul Giamatti.
Sin embargo el momento quedó petrificado con el apretón de manos que el director Christopher Nolan -el gran favorito de la temporada de premios cuya película Oppenheimer lidera esta edición de los Oscar- le dio a su fuerte contendiente Martin Scorsese.
Los ganadores de la 96 edición de los Oscar se darán a conocer el 10 de marzo en una ceremonia televisada que se llevará a cabo desde el teatro Dolby de Los Ángeles, California.
CNN