El proceso de licitación para explotar recursos naturales en el Esequibo reactivó la disputa entre Guyana y Venezuela.
El Gobierno del presidente, Nicolás Maduro, acusó a la transnacional Exxon Móbil de sembrar la discordia e instar a Georgetown a violar los acuerdos entre ambos países.
Luego de los descubrimientos de yacimientos petroleros y otras riquezas minerales, el tema del Esequibo volvió a tomar fuerza y aún más por la intervención de multinacionales que, a juicio del Gobierno de Maduro, tienen «intereses imperiales».
¿Qué ha ocurrido en los últimos días?
Recientemente, la tensión aumentó luego de la primera ronda de licitación de bloques petrolíferos que cerró con ofertas para ocho de los 14 proyectos el pasado 14 de septiembre. Entre las empresas involucradas estaba la estadounidense Exxon Mobil.
La reacción el Ejecutivo Nacional se produjo días después cuando calificó el proceso como ilegal por disponer de áreas marítimas que están en disputa.
Al respecto, el presidente guyanés, Irfan Alí, reiteró el 19 de septiembre que su país tiene pleno derecho a explotar sus recursos y que el territorio situado al oeste del río Esequibo pertenece a Guyana.
Ese mismo día, el Ejecutivo de Maduro deploró la respuesta del país vecino por «pretender arrogarse la facultad de convocar un ilegal proceso de licitación».
Pronunciamientos internacionales
En la disputa también entró la Organización de Estados Americanos (OEA), cuya posición irritó a Caracas por considerar que favorece a los intereses de Georgetown. En ese sentido, la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, acusó al secretario general de la OEA, Luis Almagro, de sumarse a la «camarilla de empleados de la estadounidense ExxonMobil para agredir a Venezuela».
El 20 de septiembre, el Gobierno venezolano criticó la «intromisión insolente» de Brian Nichols, encargado para América Latina del Departamento de Estado y aseguró que el país norteamericano ha manipulado, a través de la Exxon Mobil y el Comando Sur, a los políticos guyaneses.
En el Parlamento venezolano también hubo una respuesta el 21 de septiembre: de manera unánime se aprobó convocar un referendo consultivo para «reforzar los derechos» de Venezuela sobre el Esequibo.
El canciller Yván Gil aprovechó la intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York para denunciar las pretensiones de Estados Unidos de crear una base militar en Guyana.
Ante toda esta situación, el presidente Maduro instó a su homólogo guyanés a evitar una «escalada en el conflicto» y propuso una reunión promovida por la Caricom para retomar el Acuerdo de Ginebra.
Precisamente esta organización caribeña reiteró su apoyo a la soberanía e integridad territorial de Guyana, incluido su «derecho» a explotar sus recursos.
Este domingo, la Asamblea Nacional rechazó que Guyana intentara «cuestionar» su llamado a un referendo consultivo, pues es una «decisión soberana» de los poderes venezolanos.
Historia
Recordemos que El Esequibo es un territorio de 160.000 kilómetros cuadrados que estuvo bajo control del imperio español desde 1777, como parte de la Capitanía General de Venezuela.
En 1814, Reino Unido tomó toda la zona al este del río Esequibo luego de llegar a un acuerdo con Países Bajos. Una vez disuelta la Gran Colombia, se estableció que ese caudal fuera el límite entre Venezuela y la colonia británica, apelando al principio del Uti possidetis iuris (como posees, puedes seguir poseyendo).
26 años después Reino Unido designó al explorador Robert Schomburgk para que trazara la línea limítrofe occidental, el cual reclamaba cerca de 80.000 kilómetros cuadrados más.
En 1841, el entonces presidente venezolano, José Antonio Páez denunció la expedición británica y pidió ayuda a Estados Unidos, pero no fue hasta 1899 cuando se firmó el primer tratado sobre la disputa.
Laudo Arbitral de París
El famoso Laudo Arbitral de París terminó de reconocer el Esequibo como parte de la colonia británica. Venezuela declaró nulo este acuerdo por considerar que no había representantes suyos dentro de ese tribunal.
En 1962, el canciller venezolano, Marcos Falcón Briceño, acudió a la ONU para denunciar el carácter írrito del Laudo, valiéndose de un documento de Mallet Prevost, representante estadounidense del Tribunal ad hoc formado en 1899 y en el que se revelaba las negociaciones secretas para despojar a Venezuela del Esequibo.
Esto conllevó a la firma del Acuerdo de Ginebra en 1966, el cual contempla la intervención del secretario general de la ONU, si no se llegaba a una solución pacífica.
Partiendo del artículo 33 de la Carta de Naciones Unidas, Antonio Guterres, máximo representante de las Naciones Unidas, estableció en 2018 que la Corte Internacional de Justicia de La Haya examinara el caso.
Esta instancia se declaró competente para resolver el conflicto en abril pasado, un fallo que rechaza Venezuela, mientras sigue insistiendo en los protocolos establecidos en el Acuerdo de Ginebra.
UR