La repentina suspensión del contrato que había impulsado las exportaciones de coque de petróleo venezolano ha provocado un «cuello de botella» de buques cisterna a la espera de cargar el producto y ha hecho que los clientes se peleen por suministros alternativos, según fuentes y datos.
El contrato, suscrito 2017 entre la petrolera estatal PDVSA y Maroil Trading, con sede en Ginebra, propiedad del empresario venezolano Wilmer Ruperti, ayudó a que las exportaciones de este derivado del petróleo, utilizado como alternativa al carbón, se multiplicaran por 7 entre 2021 y 2022.
Pero el acuerdo se suspendió el mes pasado en medio de una disputa sobre cuentas por cobrar y la extensión del contrato, según revela Reuters.
La pelea con Ruperti por el coque de petróleo
La medida se tomó después de que una auditoría interna, ordenada por el presidente de PDVSA, Pedro Tellechea, encontrara discrepancias en los pagos. Ruperti ha declarado que no hubo irregularidades y que aún se le deben 300 millones de dólares, indicó una nota de Bloomberg.
En el centro de la actual discrepancia entre Ruperti y PDVSA se encuentra un contrato de cinco años firmado en 2016.
En virtud del acuerdo, Maroil acordó invertir 138 millones de dólares en una terminal marítima en Venezuela, a cambio del derecho a vender y retener la mayor parte de las ganancias de alrededor de 12 millones de toneladas métricas de coque de petróleo.
El coque es utilizado para producir electricidad y encender hornos de cemento en todo el mundo.
En una entrevista, Ruperti dijo que el contrato, que expiraba en 2021, se prorrogó dos años debido a la pandemia. PDVSA, dice, niega que el contrato haya sido prorrogado y quiere que Maroil pague por los cargamentos de coque de petróleo vendidos después del plazo original de 2021, indicó la agencia estadounidense.
Exportaciones de coque se derrumban
Las exportaciones de coque de petróleo de Venezuela cayeron a 56.000 toneladas métricas en junio, desde más de 620.000 toneladas en enero, un descenso acumulado de 91%.
No es que el coque de petróleo sea un producto estratégico para Venezuela, pero es una corriente de exportación que ayuda en un momento cuando la caja de PDVSA está severamente comprometida.
En lo que va de mes, PDVSA sólo ha autorizado el embarque de un cargamento de 70.000 toneladas. Pero hasta el martes pasado el buque no había zarpado, mostraron los datos de envío vistos por Reuters.
Otros ocho buques están cerca de los puertos venezolanos a la espera de cargar un total de 350.000 toneladas, según los datos. El coque de petróleo se utiliza principalmente en países como Francia y China.
Venezuela exportó el año pasado unos 3,3 millones de toneladas métricas de coque de petróleo, en su mayor parte comercializadas por Maroil, que en los últimos años ha firmado acuerdos comerciales con otras empresas para llegar a clientes finales.
Un alto ejecutivo de una empresa cementera del sur de la India declaró que su proveedor de coque de petróleo venezolano ha cancelado tres contratos desde el mes pasado, alegando incertidumbres relacionadas con su capacidad para suministrar el producto.
«Esperamos que alguien más sustituya a Maroil», dijo el ejecutivo, que no quiso revelar el nombre de sus proveedores.
Nuevas condiciones
PDVSA ha aprobado en los últimos meses nuevos compradores e intermediarios para sus ventas de coque de petróleo, una medida para ampliar su lista de clientes y llegar directamente a los compradores extranjeros.
«Ningún comprador indio debería intentar conseguir material venezolano sin una garantía de que el pago sólo se efectuará en el momento de la descarga», dijo otro cliente, citando retrasos en la entrega en el pasado.
os precios internacionales del coque de petróleo han bajado este año debido a los desequilibrios entre la oferta y la demanda, según el comerciante I-Energy Natural Resources, con sede en Gujarat.
Pero una caída similar de los precios del carbón, que es un combustible alternativo, ha motivado a algunos importadores de Asia a abandonar el coque de petróleo venezolano.
El coque de petróleo de origen venezolano se vendía a 105 dólares la tonelada a finales de la semana pasada.
En cambio, el coque de petróleo de origen saudita se cotizaba a 103 dólares la tonelada, y el mismo combustible procedente de la costa estadounidense del Golfo de México para entrega en la India, a 105 dólares la tonelada en el mismo periodo, según I-Energy.
El Nacional