El precio de los bonos soberanos y de Petróleos de Venezuela se desplomaba en la apertura de la jornada de este viernes luego de que el gobierno de Nicolás Maduro anunciara una reestructuración de la deuda externa del país.

Los bonos soberanos pierden en promedio 12,3% con el papel 2019 cayendo 37%, el 2022 bajando 32,4% y el 2020 cediendo 27,7%.

Por el lado de Pdvsa la caída es más grave, con una media de 22,5%. El bono 2021 pierde 37,9%, el 2022 cae 37%.

Banca y negocios

Distintas reacciones ha generado en el sector empresarial el aumento de 30% del salario mínimo decretado por el Ejecutivo Nacional. Algunos consideran que es positivo mientras otros dicen que se trata de una medida aislada que agrava la inflación.

Gerson Hernández presidente de la CBC afirmó que es importante proteger el poder adquisitivo del trabajador. Aclaró que el impacto del ajuste salarial sobre la estructura de costos de las empresas es de 8% aunque reconoce que los niveles de producción están bajos por falta de materia prima y de encadenamiento productivo.

El presidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal, apuntó que nuevamente el gobierno hace un aumento salarial “sin el debido consenso tripartito establecido por la OIT y plasmado en leyes”.

Dijo que el Ministerio del Trabajo les envió una correspondencia el mismo miércoles “lo cual evidencia una consulta totalmente inoficiosa. A pesar de que en una reunión con él, hace una semana, insistimos en la necesidad de implementar políticas responsables que ataquen el tema inflacionario porque los aumentos aislados agravan el problema”.

En esto coincide con la presidenta de Consecomercio, María Carolina Uzcátegui, quien dijo que debe eliminarse el control de cambio y aclaró que el sector empresarial se encuentra tomando las previsiones para lidiar con el ajuste que asegura es insuficiente porque el país está atravesando una hiperinflación.

El presidente de Confagan, José Agustín Campos saludó la medida “porque el poder adquisitivo del salario siempre hay que fortalecerlo”. Insistió en la necesidad de que se aumente la producción y la productividad de todos los sectores “tomando decisiones macroeconómicas que disciplinen la economía y que permita la incorporación de nuevos actores al proceso productivo.

El presidente de Fedeagro, Aquiles Hopkins, reconoció que el aumento salarial era necesario, pero alerta respecto a que con medidas aisladas no se logra absolutamente nada porque el problema fundamental es la escasez y el desabastecimiento que enfrentan los venezolanos.

EU

Venezuela registró en octubre una inflación de 50,6% con respecto al mes anterior, lo que significa que está entrando técnicamente en hiperinflación al rebasar por primera vez en su historia el umbral de 50%, que define este concepto, anunció la firma de asesoría económica y financiera Econométrica, que junto con el Parlamento y otras entidades privadas ofrecen periódicamente un cálculo de la inflación en el país ante la ausencia de datos públicos del Banco Central.

«Con la inflación general de octubre de este año de 50,6% con respecto a septiembre, Venezuela entra en la definición técnica de hiperinflación planteada por Philip Cagan», se lee en la cuenta de Twitter de Econométrica, que hace referencia al economista estadounidense que acuñó el concepto en 1956. La firma habla de un «máximo histórico» de inflación en la historia de Venezuela, que atraviesa una grave crisis humanitaria marcada por la escasez y la carestía de productos básicos como alimentos o medicamentos.

Fuentes de la empresa asesora explicaron que Venezuela lleva años cumpliendo con creces las condiciones que llevan habitualmente a la hiperinflación, entre las que destacan la emisión descontrolada de dinero por parte del BCV y el descenso de bienes en el mercado a causa de la caída de la producción.

Un día antes de que se difundieran los datos que sitúan a Venezuela, el presidente Nicolás Maduro anunció el quinto aumento de salario mínimo en lo que va de año y el número 39 desde que comenzó en 1999 la revolución bolivariana.

El instituto emisor presentó por orden de Maduro el billete de 100.000 bolívares, el de más alta denominación emitido hasta ahora. El mayor billete existente era el de 20.000 bolívares. «Esto era algo que había que hacerse, pero faltaría el de 50.000 bolívares, pues no habrá para dar el vuelto, debería mandarse a imprimir de una vez para simplificar un poco el medio de pago», dijo el economista José Guerra, presidente de la Comisión de Finanzas, y destacó que la medida «está poniendo en evidencia la hiperinflación».

El diputado se mostró pesimista sobre las perspectivas del país ante esta crisis. «Este es el camino que nos lleva al barranco porque no resuelve el problema de fondo que es la inflación y el gobierno no está en capacidad de hacerlo. Es hora de presentar un programa económico que baje la inflación», dijo Guerra en una entrevista a Unión Radio. Pronosticó otro «salto» de la cotización del dólar paralelo con respecto al bolívar «que generará un espiral inflacionario».

EFE