La pérdida del deseo sexual puede deberse a muchas razones, desde cambios hormonales como los que ocurren durante el embarazo o la menopausia, pasando por diversas patologías, apatía, problemas en la relación, tensiones acumuladas, etc. Cuando llevamos tiempo en una relación, el deseo puede fluctuar y llegar a niveles muy bajos en ocasiones, lo que produce tensión y problemas en la pareja. A continuación algunas recomendaciones para que descubras cómo combatir la pérdida del deseo sexual y recuperar tus ganas.
Instrucciones:
1. Uno de los pasos que se deben dar cuando detectamos que nuestro deseo sexual ha disminuido es intentar identificar la causa: si se trata del efecto secundario de alguna medicación, si se trata de un cambio hormonal, si es producto de las tensiones, de la rutina sexual y la monotonía, si es porque no nos sentimos a gusto con nuestra pareja, porque no nos excita, porque no encontramos placer en el sexo, si sufrimos de algún tipo de disfunción sexual como la eréctil, la anorgasmia, el vaginismo etc. Dependiendo de la razón el modo de encarar la situación podría variar, de cualquier modo el trabajo en pareja siempre es necesario para combatir la pérdida de deseo sexual.
2. Si se trata de una pérdida de deseo sexual derivada de la rutina, las tensiones en la pareja, el estrés generado por causas externas como problemas económicos, la monotonía o el aburrimiento sexual, hay algunas medidas que podemos tomar para reavivar la llama y volver a tener encuentros plenos y satisfactorios con la frecuencia deseada.
3. El primer paso necesario es salir por completo de la rutina sexual y animarse a probar nuevas cosas en la cama. La repetición de actos una y otra vez acaba por aburrir, por eso no solo se trata de experimentar con posturas sexuales diferentes sino de, por ejemplo, planear un encuentro sexual especial, probar nuevos lugares en la casa y fuera de ella para tener sexo, animarse a darle un nuevo giro al sexo para que sea una experiencia que los anime a ir más allá y probar, a recuperar el deseo y las ganas de estar juntos.
4. La imaginación es parte activa y fundamental del sexo, por eso resulta importante usarla para darle más placer a cada encuentro. Jugar a complacer fantasías sexuales es siempre una idea genial siempre y cuando ambos se sientan cómodos con la idea. Hay juegos muy sencillos y estimulantes, como el juego de roles, que pueden reavivar la pasión y espantar la pérdida del deseo sexual.
5. Es muy importante no temer innovar y cambiar y probar juntos todo aquello que los excite y los estimule. Una de las causas de la pérdida de deseo sexual se debe a los tabúes y las restricciones sexuales personales, por eso es necesario liberar nuestra mente y prepararla para el placer. Si ambos lo desean anímense a experimentar con otras formas de pasión como el sexo anal, el BDSM, la dominación. No cierren la puerta a una idea sin antes saber que hay detrás de ella, pues descubrir las posibilidades de la intimidad en pareja es también una experiencia de crecimiento que los hará sentirse mucho más unidos.
6. No duden en usar todas aquellas herramientas que estimulan la excitación, por ejemplo una cena romántica, un masaje sensual, la lencería erótica, etc. Es importante recordar que todo entra por la vista y pasa a través de las sensaciones, un clima romántico, cálido, sexy hará que nuestras ganas salgan a flote. A todos nos gusta sentirnos estimulados e incitados, nos agrada la provocación, por eso trabajen en conseguir provocarse como pareja y verán un importante cambio en su comportamiento sexual.
7. Diviértanse usando juguetes sexuales juntos, una buena forma de complacer también algunas fantasías sexuales y de explorar el cuerpo del otro. Es esencial romper los tabúes sexuales para conseguir disfrutar mucho más del sexo en pareja y mantener a raya la pérdida del deseo y la monotonía.
8. Hablen, hablen ¡HABLEN! El sexo es una forma física de comunicación, pero muchas veces se requieren de palabras para que el otro sepa lo que nos gusta. Si la pérdida del deseo sexual se debe a la monotonía, a la rutina, al aburrimiento, a la falta de emoción, es importante conversarlo y probar nuevas cosas para mantener alejado ese sentimiento de tedio. Tu pareja no siempre puede adivinar lo que te gusta por eso es importante usar palabras para expresarlo.
9. Mantener una vida saludable es también necesario para que nuestro deseo sexual esté en su punto justo. No solo se trata de alimentarnos bien sino de practicar actividad física, en especial cardiovascular como la natación, correr, montar bicicleta, etc, pues ésto mejora la circulación sanguínea lo que favorece la excitación, en especial en el caso de los hombres mejorando la duración y calidad de loas erecciones. Además nos hace sentirnos bien, seguros de nosotros mismos y a gusto con nuestro cuerpo, lo que sin duda beneficiará el aspecto íntimo.
10. Salir de la rutina sexual y recuperar el deseo es posible si ambos están dispuestos a trabajar por ello, a romper la monotonía, probar cosas nuevas, hablar, atreverse a disfrutar y a darle cabida al placer. Si la pérdida de la libido se debe a cambios hormonales, disfunción, abuso de drogas o alcohol o problemas más profundos en la relación, lo mejor es acudir a un especialista que los guíe y los ayude a superar la pérdida del deseo sexual.
Por Confirmado: Oriana Campos