¿No puedes deshacerte de los fastidiosos catarros, o dejar de toser o prevenir el contagio de otra infección de la garganta?
A continuación te enumeramos algunos consejos para este tipo de problemas.
Bebe líquidos fríos
Para las personas que sufren de resfriados frecuentes, en principio, esto puede sonar como una “sentencia de muerte”. Muchos personas que sufren de enfermedades de oído, nariz y/o garganta crónicos evitan el consumo de bebidas frías por temor a provocar otro episodio molesto. Al hacer esto, sin saberlo, comienzan un círculo vicioso. Muchos doctores recomiendan que se introduzcan, de manera gradual, alimentos y líquidos fríos en su menú diario. Es tan sencillo como chupar un cubito de hielo y beber agua fría en vez de agua a temperatura ambiente. Esto acondiciona la garganta, la nariz y los oídos y los hace más inmunes para resistir invasores virales y bacterianos comunes. Míralo como un entrenamiento para que tus oídos, nariz y garganta puedan soportar temperaturas más frías; verás como disminuye el número de resfriados recurrentes que tendrás cada año.
Practica el lavado de los senos nasales
Familiarízate con una olla Neti, es uno de los dispositivos más prácticos para detener los resfriados e infecciones del oído. La Olla Neti parece una tetera con un pico alargado que se inserta en el orificio nasal y sirve para “lavar” los senos nasales. Para estos lavados se pueden utilizar sobres de sales ya preparados que se disuelven en agua caliente, de acuerdo a las instrucciones impresas en el empaque. También puedes preparar una solución de salmuera mezclando 1 cucharadita de sal marina natural en 2 tazas de agua destilada caliente. La sal marina ayuda a neutralizar las sustancias irritantes, comunes del hogar y responsables de alergias estacionales y también puede eliminar a los virus que causan resfriados y gripe. Remedios caseros para la sinusitis
Ejercita la respiración.
El Yoga promueve la práctica de ejercicios de respiración para combatir la sinusitis y reducir la probabilidad de contraer resfriados. Según los médicos otorrinolaringólogos, es imprescindible practicar ejercicios de respiración en una habitación bien ventilada o en la ducha. Las duchas de vapor ayudan a humectar las fosas nasales y aumentan el flujo de oxígeno del cuerpo.
Reduce el consumo de productos lácteos por un tiempo
Aunque el consumo de leche no hace que el cuerpo produzca más flema, si hace que ésta sea más espesa e irritante para la garganta. Para un individuo sano, esto no es un problema, sin embargo, la flema en una persona con un sistema inmune deficiente es garantía segura de sufrir de infecciones recurrentes de los senos nasales y de los oídos. Si tienes más de dos infecciones de este tipo al año, anota en un diario lo que consumes, esto te ayudará a definir que alimentos o circunstancias podrían estar desencadenando las infecciones. Para los niños con frecuentes problemas de otitis media, reducir los productos lácteos de su dieta reducirá también la probabilidad de deterioro potencial de la audición – común después de tales incidentes.
Limita los azúcares
Consumir cantidades abundantes de alimentos cargados de azúcar e incluso demasiada fruta, podría ser la causa de infecciones recurrentes. El azúcar es perjudicial para la salud ya que puede causar una serie de condiciones de salud y enfermedades, y además puede crear un entorno favorable para que prosperen las bacterias en el cuerpo. Come por lo menos 5-6 porciones de vegetales crudos todos los días. Puedes probar reemplazando los jugos de frutas por jugos de vegetales para ayudar a tu cuerpo a combatir las infecciones estacionales.
Come ajo
El ajo es efectivo para luchar contra los virus, bacterias y hasta hongos que pueden invadir fácilmente las cavidades nasales. El ajo se debe comer crudo en ensaladas, sopas, sándwiches o en salsas. El ajo no es solamente bueno para comer, también es un excelente remedio casero para combatir el resfriado y la gripe. Para combatir la otitis media (siempre y cuando no haya perforación del tímpano), tritura un diente de ajo en un poco de aceite de oliva caliente. Pon 1-2 gotas de este aceite en cada oído para combatir las infecciones y el equilibrar la microflora.
Fuente: naturisima