Entregar tarjetas de crédito a unos 200.000 jóvenes a través del programa Somos es la meta del Banco de Venezuela este año. Así lo dio a conocer el ministro para la Banca Pública, Rodolfo Marco Torres, quien junto a Héctor Rodríguez, encargado de la cartera de la Juventud, inició el proceso de entrega de este y otros instrumentos destinados personas jóvenes del país cuyas edades oscilen entre 18 y 35 años.

La tarjeta de crédito Somos tiene un límite de hasta 6.000 bolívares, monto que se aprobará de acuerdo a la capacidad de pago, según lo informó el titular para la Banca, «el monto se irá incrementando en la medida que el tarjetahabiente pague bien y tenga un buen historial crediticio.

La misma contará con una tasa de interés preferencial de 14%, la más baja del mercado, y un crédito rotativo de hasta 36 meses».

Todo está enmarcado dentro del programa de educación financiera del BDV afirmó Marco Torres.

«La tarjeta es parte de un servicio financiero innovador, sirve para proyectos personales. Puedes adquirir una computadora personal, un teléfono, algo necesario para los estudios o en caso de que requieran solventar algo».

Esta tarjeta, refirió el titular de la Juventud, tendrá la ventaja de dar récord crediticio a los jóvenes, quienes históricamente han tenido dificultades para obtener cualquier referencia de este tipo, sobre todo si son estudiantes o no tienen experiencia laboral.

«Ello representará un beneficio de inclusión para la juventud venezolana con excelentes condiciones de pago», destacó Rodríguez.

El plástico, que cuenta con un diseño y color diferentes, también dará la posibilidad a los jóvenes de solicitar créditos productivos para ayudarse en la adquisición de implementos para trabajar o iniciar un pequeño negocio, explicó el ministro Rodríguez.

El estudio del instrumento financiero, aseveró Rodolfo Marco Torres, se hizo en base al buen récord crediticio que tienen los venezolanos, y «la baja morosidad que ostenta nuestra banca de 0,83% y mejor aún en el Banco de Venezuela, entidad en la cual la cartera morosa es de solo 0,53%».

La tarjeta podrá ser usada a nivel nacional e internacional con autorización de Cadivi y tendrá capacidad de dar avances de efectivo por cajeros automáticos de hasta 300 bolívares mensuales. Sin embargo serán rechazadas en joyerías, licorerías, casas de empeño, de apuestas, bingos, casinos, tascas, bares y discotecas.

Un requisito básico para su solicitud es estar inscrito en el Registro Nacional de la Juventud, que se encuentra en la página del Ministerio para la Juventud.

En este evento también se presentó la Cuenta Clave Digital Somos, la cual puede ser abierta con cero bolívares y su respectiva tarjeta de débito . Esta cuenta permitirá tener descuentos en redes de comercios privados adscritos al Ministerio de la Juventud, Conviasa y la red de hoteles Venetur.

Cifras oficiales

El Banco Central de Venezuela fijó el 9 de julio de este año las tasas de interés anuales para las tarjetas de crédito, en un rango que va de 17% la mínima hasta 29% la máxima, y 3% adicional a la tasa de interés pactada por concepto de obligaciones morosas. La nueva tarjeta Somos contará con una tasa de financiamiento activa inferior a este rango: 14%.

Mientras la mayoría de las instituciones bancarias se ubicaron en la tasa máxima de financiamiento para la fecha de publicación de la resolución, hubo entidades que disminuyeron la brecha, especialmente las entidades públicas. El Banco del Pueblo Soberano tiene financiamiento de acuerdo a cuatro niveles en: 19%, 21%, 23% y 25%.

Por su parte, para la tarjeta Cédula del Buen Vivir Bicentenario, el Banco de Venezuela fijó en 15% la tasa de interés activa mínima anual a ser aplicada a las operaciones realizadas con dicho instrumento. Igualmente, esa institución bancaria en la tarjeta de crédito identificada como Cédula del Buen Vivir Turismo presentó una tasa máxima de financiamiento de 18%.

De igual manera, el Banco Nacional de Crédito, en su tarjeta privada, estableció una tasa del 26%.

La tasa de mora para tarjetas de crédito se ubicó en 3% anual para todas las instituciones bancarias venezolanas.

Fuente: El Mundo