Tras no conseguir avanzar como esperaba con la contraofensiva de este verano, Ucrania se prepara para un invierno a la defensiva ante un Ejército ruso que ha vuelto a la carga en el este con nuevas ofensivas masivas que le han permitido recuperar la iniciativa.
En estas circunstancias, el presidente Volodímir Zelenski anunció en su discurso a la nación de anoche que ha ordenado “reforzar de forma significativa” las fortificaciones defensivas ucranianas.
“Los fondos existen y todas las decisiones están tomadas. Ahora debe hacerse el trabajo correspondiente sobre el terreno. Todo está perfectamente detallado. Hay minas (explosivas) y cemento suficientes”, dijo Zelenski sobre las órdenes que ha dado a las autoridades correspondientes.
El presidente ucraniano señaló que “se necesita más rapidez y efectividad” en el refuerzo de las fortificaciones. “Todos los que responden de esto tienen tareas claras”, remachó el jefe del Estado.
Según muchos expertos militares, la contraofensiva ucraniana no logró los objetivos esperados este verano debido, en gran parte, a la solidez de las fortificaciones construidas por Rusia en el sur.
Mientras Ucrania preparaba su contraofensiva y esperaba de sus aliados occidentales más armas y munición para poder lanzarla, Rusia se dedicó a sembrar densos campos de minas y a construir y desplegar otros tipos de obstáculos que han dificultado enormemente el avance ucraniano.
EFE