Zamora inicia la segunda vuelta de la fase de grupos en la Copa Libertadores cuando reciba a Boca Juniors (Argentina) con un panorama muy complicado luego de ser goleado en Buenos Aires (5-0) y sin poder sumar en el certamen internacional.
“La semana pasada sufrimos una derrota muy dura para todos, donde luego del partido trabajamos para sacarnos el cansancio y sacar un resultado positivo, ya que nos urge sumar de local para seguir en carrera”, comentó el técnico Julio Quintero.
“Enfrentamos a un rival de mucho pergamino en copa, que nos neutralizó en Buenos Aires y nos derrotó”, añadió.
Zamora recupera a Jhon Murillo luego de dos partidos de suspensión. “Murillo es un hombre clave en nuestro equipo que nos aporta mucho vértigo en ataque y necesitamos aprovecharlo. La clave será mantener nuestro esquema de juego, ser inteligentes y mantener la concentración los noventa minutos”, resaltó.
Ahí viene Boca. Con puntaje ideal y luego de ocho horas de viaje, los dirigidos por Rodolfo Arruabarrena se instalaron el domingo por la noche en Barinas, y con un equipo lleno de variantes se prepara en una ciudad desentendida del partido.
Los argentinos, que viajaron con un grupo grande de periodistas e hinchas, trabajaron el lunes por la noche en La Carolina a puerta cerrada.
Poco ambiente. A diferencia de la primera visita de Boca Juniors a Barinas en 2012, en esta ocasión existe poco ambiente de fútbol en la ciudad: hasta ayer solo se habían vendido alrededor de tres mil entradas. El interés del encuentro en los barineses ha bajado luego de la goleada en Buenos Aires (5-0) y del plantel alterno que trajo el Xeneize, como también le dicen a Boca.
Escrito por: Joseth Herrera
Fuente: Últimas Noticias