El presidente de Colombia Gustavo Petro, en medio de un discurso contra los sectores de oposición que el miércoles hundieron su nueva reforma tributaria, respondió a las críticas sobre la respuesta del Gobierno a la crisis política en Venezuela. Aunque el Ejecutivo ha dicho que no reconocerá a ningún ganador de las elecciones presidenciales en ese país, aún no ha respondido sobre si asistirá a la posesión de Nicolás Maduro, el próximo 10 de enero.
Según el mandatario, esa será su decisión y no se la pueden imponer desde el Congreso. “Ahora me dicen que vaya a Venezuela, yo veré si voy o no. Dentro de mí están los principios por los que luchó Bolívar, que era una democracia justa, y por los cuales se fundó el M-19 por unos caribeños”, señaló.
La Casa de Nariño no ha respondido oficialmente a la invitación, pero ni el presidente ni el canciller Murillo asistirían.
Petro explicó que en Colombia y América Latina, especialmente en el país que vio nacer a Bolívar, debe primar la democracia. Sin embargo, volvió a insistir en que es su decisión, como jefe de la diplomacia y las relaciones exteriores, el hacer presencia o rechazar la invitación en la posesión de Nicolás Maduro, empeñada por las denuncias de fraude hechas por la oposición del país vecino.
El mandatario ya les había respondido a los más de 70 congresistas que le pidieron no asistir a la posesión. El jefe de Estado dijo que en su respectivo momento tomará una decisión. “El presidente es el responsable constitucional de las relaciones exteriores de Colombia, invito al Congreso a no invadir la esfera constitucional del presidente. En su debido momento decidiré si asisto o no a la posesión del actual presidente de Venezuela”, indicó en su cuenta de X.
En el Legislativo, quienes apoyaron la proposición señalan que asistir a ese evento sería “interpretado como un reconocimiento tácito a un gobierno cuya legitimidad está cuestionada, lo cual contravendría la posición de Colombia en defensa de la democracia y los derechos humanos. Sin actas no hay reconocimiento”.
Este jueves, tras las nuevas declaraciones del presidente, otros congresistas de oposición reaccionaron en contra. “Me parece que si el presidente quiere ir a apoyar al dictador Maduro debe hacerlo; es mejor saber de qué lado está”, comentó Paloma Valencia, senadora del Centro Democrático.
La postura del Gobierno frente a la crisis política en Venezuela no se ha definido completamente, pues aunque el mismo jefe de Estado ha asegurado que no reconocerá a Maduro hasta que no se publiquen las actas de votación, también se ha asegurado que el gobierno no romperá relaciones bilaterales. Hasta hace poco se había dicho que solo asistiría a la posesión el embajador Milton Rengifo, pero ahora todo indica que el tema se definirá horas antes del 10 de enero.