Las celebraciones en Alemania por la obtención de la Copa del Mundo despertaron violencia y graves expresiones de racismo, que provocaron la muerte de un joven durante una refriega y una mujer en grave estado después de recibir un disparo durante una caravana.
Los graves hechos fueron reflejados casi con exclusividad por el Neus Deustchaland (Nueva Alemania, ND), tradicional periódico socialista que narró en soledad los desmanes, ocurridos principalmente en la ciudad de Hamburgo, al tiempo que advirtió sobre la multiplicación de expresiones de racismo mediante las redes sociales.
Según el diario, desde la madrugada del lunes varias ciudades alemanas fueron escenario de «ataques xenófobos y nacionalistas», como sucedió en Hamburgo, donde un grupo de violentos irrumpió en un bar para provocar incidentes y, posteriormente, realizar manifestaciones racistas en torno al hecho a través de las redes sociales.
En Bremen, la violencia terminó en tragedia cuando un joven de 19 años murió apuñalado después de una disputa entre grupos violentos.
A este episodio se sumó, según refleja ND, el ataque sufrido por una joven de 23 años, herida gravemente de bala mientras participaba de una caravana de festejo en Bergheim.
En Hamburgo tampoco faltaron choques entre barras, donde seguidores del HSV provocaron destrozos y atacaron a seguidos del mítico St Pauli, club emblema contra el fascismo.
En el marco de los incidentes tres personas resultaron heridas por golpes y cortes.
En Jena, a su vez, un miembro del Parlamento, Katherine König, fue golpeada por aficionados mientras se dirigía a un centro de juventud, según denunció a través de Twitter el Partido de izquierda Die Linke.
En tanto, a través de Twitter se denunciaron distintos ataques racistas, acciones neonazis, expresiones de xenofobia e insultos hacia la Argentina, siempre ante la pasividad policial, que incluso se sacaba `selfies` con los violentos.
Espn