La presencia de Novak Djokovic sigue en el aire. Por ahora, el serbio es libre, puede quedarse en Melbourne e incluso podría jugar el Australian Open que comienza el lunes 17 de enero. El juez Anthony Kelly falló a su favor en la cancelación de su visado tras declarar que el tenista fue tratado de mala forma por las autoridades de inmigración.
No obstante, la amenaza de una deportación aún le sigue como una sombra, pues el ministro de Inmigración, Alex Hawke, todavía tiene el derecho de aplicar el Acta de Migración y usar su capacidad legal para deportar a Djokovic.
Como indica el Acta de Migración el Ministro tiene la potestad de deportar a los no-ciudadanos bajo la base de ser un riesgo para «la seguridad, el orden o la salud de la comunidad australiana».
De hecho, mientras Novak Djokovic era liberado varias personas que estaban protestando por su liberación se enfrentaron a la policía. Las fuerzas antidisturbios rociaron a los ciudadanos con gas pimienta y dispersaron a un grupo que había bloqueado King Street, la calle que usó Djokovic después del juicio.
Según información del periódico The Age, el ministro ¨está sopesando el asunto» , dijo un portavoz de Hawke al diario.
El juez Anthony Kelly falló a favor del serbio al ver que Novak fue tratado injustamente por las fuerzas fronterizas, entonces solicitó la restauración de su visado y su liberación.
No obstante, la misma Acta de Migración bajo el artículo 136 subsección C, le da la potestad al Hawke de revocarle de nuevo la visa y deportarlo con una suspensión de entrada al país durante tres años, pues este estatuto le da el poder de revisar las decisiones de los tribunales.
Así, de acuerdo a The Age, Alex Hawke -junto a su abogado Christopher Tran- están evaluando la posibilidad de ejercer estos artículos para deportar a Novak Djokovic.
El anuncio del ministro Hawke se dará el día martes a las 9 pm hora australiana (6:00 am hora Venezuela).
La ambición del 21º y el 10º
Pase lo que pase, la importancia de jugar el Open de Australia va más allá de un simple torneo para Novak Djokovic.
En caso de ganar, el serbio hará historia al ser el tenista con más Grand Slams en la Era Abierta con un total de 21 (frente a los 20 de Rafa Nadal y Roger Federer) y alargaría su idilio con el Australian Open al obtener el décimo título. Así se convirtiría en el segundo tenista de la historia con 10 títulos de un major, solo Rafael Nadal tiene ese registro.
Y, además, se erigirá como héroe para muchos de sus leales seguidores que en estos días han impulsado una campaña tanto en redes sociales como con concentraciones en las calles para respaldar al número uno del mundo.
Novak Djokovic, por lo tanto, terminará este Open de Australia reforzado de una forma u otra.
En caso de jugar la motivación será extra, como apunta Nick Kyrgios, pues habrá ganado tanto el torneo después de una batalla legal contra Australia por las medidas Covid-19 y la vacunación. Si el país acaba deportándole, el serbio seguirá como vencedor después de haber recibido el visto bueno del tribunal australiano para poder quedarse en Australia
La historia espera la decisión del ministro y Djokovic la oportunidad de hacer realidad su ambición, aunque no se sabe qué título se llevará bajo el brazo: el de campeón o el de deportado.
Fuente: El Nacional