Miles de ciudadanos experimentan problemas para encontrar comida y remedios. La economía mantiene al país en máxima tensión
A la escasez de alimentos, se suma el desabastecimiento de medicamentos en la mayoría de las farmacias de Venezuela. Según reportan los medios locales, cientos de personas que necesitan tratamiento no han podido encontrar sus remedios, debido a las fuertes trabas para importarlos en medio del estricto control cambiario que rige en el país desde hace 10 años.
«Es el pan de cada día. Está horrible conseguir cualquier remedio», se lamentó Héctor Mendoza, paciente de 72 años afectado por las secuencias de una trombosis pulmonar,. «Hace tiempo que tomo Prodaxa y ahora está más difícil que antes conseguirlo», aseguró en diálogo con la agencia de noticias EFE.
La situación dista de ser nueva, pero se ha visto agravada en el último tiempo. Los laboratorios alegan que, desde que el Gobierno de Nicolás Maduro eliminó un sistema alternativo con el que las empresas podían abastecerse de dólares, no pueden acceder a las divisas necesarias para pagar a los proveedores internacionales.
«El primer problema tiene que ver con la liquidación de divisas, nosotros estimamos que el tiempo de respuesta a nuestras solicitudes es de 180 días promedio», explicó a EFE el vicepresidente ejecutivo de la Cámara de la Industria Farmacéutica, Ángel Márquez.
El problema también está vinculado con una ley que mantiene congelados los precios del 30% de las medicinas disponibles en el país. “Nosotros tenemos una regulación desde el 2003 sobre una cesta de un poco más de 1.400 productos farmacéuticos. Los precios de estos 1.400 productos no han sido revisados desde esa fecha», dijo Márquez.
El sector farmacéutico indica que faltan medicamentos básicos, como píldoras para dormir y tratar la hipertensión, pero también para tratamientos vitales, como cócteles antirretrovirales contra el VIH.
Además de las dificultades para conseguir remedios, los venezolanos no pueden encontrar productos de la canasta básica, vinculados también con las restricciones a las importaciones en un país que no puede autoabastecerse en términos alimenticios. En respuesta, se ha ordenado la importación de 700 mil toneladas de alimentos provenientes de los países del Mercosur.
No obstante, el Gobierno ha insistido en que la situación en ambos casos es provocada por “empresarios inescrupulosos”. Este sábado, Maduro admitió en cadena nacional que había problemas de desabastecimiento, pero apuntó contra los grupos económicos, en especial, a Empresas Polar, la mayor productora alimenticia local.
De acuerdo con Maduro, Empresas Polar esconde productos básicos para causar la escasez y así desestabilizar a su Gobierno. En ese sentido, dijo que citaría al directivo Lorenzo Mendoza, invitación que fue aceptada este mismo sábado por la corporación a través de un comunicado.
“En Empresas Polar, acostumbrados al diálogo respetuoso, informamos que estamos dispuestos a acudir a las instancias necesarias para colaborar con la búsqueda de soluciones que favorezcan a todo el pueblo venezolano y colaboren con la seguridad alimentaria del país”, informó la compañía.
A todo esto, se añade la acuciante inflación que el Gobierno aún no ha podido frenar y la falta de legitimidad del presidente, dado que el país se encuentra dividido entre quienes apoyan a Maduro y quienes denuncian falta de transparencia en los comicios en los que se enfrentó a Henrique Capriles y le ganó en una dudosa contienda con solo 200.000 votos de diferencia.
Fuente: Infobae