Obtener la cédula de identidad sigue siendo una odisea para los zulianos. Sin las unidades móviles, las opciones se reducen a las oficinas principales, que se quedan cortas para atender al alta demanda, sobre todo, en tiempos de inicio de un nuevo periodo escolar. Ante ello, muchos optan por madrugar en las sedes del Saime en Valle Frío y Sabaneta, ambas en Maracaibo.
Según constató este rotativo la noche del martes, padres, junto con sus niños, hacían cola desde las 4:00 de la tarde para estar entre los únicos 100 cupos (o números) que daría la institución para cedular a partir las 8:00 de la mañana del miércoles.
Llegan personas o familias enteras desde otros municipios zulianos porque las sedes más cercanas a sus residencias están, según cuentan los propios usuarios, colapsadas. Y si en Maracaibo entregan 100 números cada día, la situación en otras sedes resulta peor, solo entregan un máximo de 20 cupos por día. “Vengo desde el kilómetro 18, de La Concepción. Estoy aquí desde las 5:00 pm con dos sobrinitos que se deben sacar la cédula para comenzar el año escolar. Mis hijas, de 11 y 13 años, vendrán antes de las 5:00 am”, narró David Fernández.
Los zulianos pernoctan en a las puertas del Saime en improvisadas colchonetas de cartón o con tan solo un buen cojín que aguante la dureza de la acera, y una sábana para aguantar la brisa fría de la madrugada.
“Vine con mi hijo desde Cachirí para que le saquen la cédula por primera vez, llegamos a las 4:00 pm. No entiendo por qué no llevan jornadas especiales a las escuelas para evitar esto, estar aquí es un riesgo y un peligro”, señaló Rosalía Moreno.
La jefa de la oficina del Saime en Sabaneta, Yohaly Geraldo, aseguró que existe una prohibición de pernoctar frente a cualquiera de las sedes del organismo. “Hemos pedido colaboración de la Policía Nacional y del Cpbez, ellos retiran a la gente pero se vuelven a ubicar”.
Indicó que tras un trabajo de inteligencia lograron detectar a un grupo de personas que viven cerca de la sede en Sabaneta que se dedican a vender puestos en la cola. “Alarman a los usuarios diciéndoles que damos pocos números”, añadió Geraldo.
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