Dos días de protestas decretados por los trabajadores del «Underground» afecta a millones de pasajeros británicos
Un plan de cierre masivo de oficinas de venta de billetes del metro, previsto para 2015, ha arruinado el inicio de semana de millones de pasajeros en Londres. Los trabajadores han decidido repudiar el plan oficial con una huelga de 48 horas en todas las líneas, colapsando el delicado mecanismo de horarios y servicios que caracterizan al ya mítico «Underground»
La protesta ha obligado a más de 3 millones de londinenses a soportar largas filas para tomar el bus, mientras muchos otros han optado por ir al trabajo en bicicleta o en sus autos particulares.
La huelga de empleados del metro cuenta con el apoyo de del Sindicato Marítimo y de Transporte (RMT) y de la Asociación de Personal de Transporte Asalariado (TSSA). La empresa Transport for London (Tfl) ha dicho que durante la primera jornada de paro habrá algunos servicios mínimos en las principales líneas.
Los sindicatos rechazan los planes de clausura anunciados por la compañía, pues supondría el despido de al menos 750 empleados. Los líderes sindicales habían ofrecido anular la huelga si se suspendían los planes de cierre, pero las negociaciones entre las dos partes concluyeron sin ningún acuerdo.
La huelga ha preocupado incluso al primer ministro, David Cameron. En su cuenta en Twitter, la calificó de»vergonzosa» y responsable del»sufrimiento a millones de londinenses».
El alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, también calificó el paro de «inútil» y fue más allá al proponer un cambio legal que limite medidas semejantes. Los líderes sindicales de RMT y TSSA, Bob Crow y Manuel Cortes, respectivamente, criticaron al alcalde por negarse a entrevistarse con ellos para analizar el cierre de las oficinas.
Fuente Infobae
